Vemos una mejora lenta pero sostenida en el rendimiento económico de Japón según los últimos datos, que indican que el sector doméstico está liderando el auge cíclico de la actividad, con un gasto robusto durante el primer trimestre, la confianza alta y el mercado laboral en mejoría.
La tasa de paro cayó al 4,1% en marzo, un mínimo desde la crisis financiera, mientras que en el primer trimestre en su conjunto la mano de obra creció sólo por segunda vez desde el primer trimestre de 2008.
El informe sobre el gasto de los hogares corrobora la mejoría de los datos laborales, aunque un crecimiento más fuerte de los ingresos va a ser necesario para seguir adelante con la recuperación y hay salvedades importantes al agradable volcado de datos.
La actividad empresarial va rezagada, con la excepción del sector de la construcción, que se beneficia del estímulo estatal y el gasto de la reconstrucción. Esperamos ver cierto repunte en la manufactura en el segundo trimestre pese a unas cifras de producción industrial peores de lo esperado en marzo.
