Aunque el Banco de la Reserva de la India (RBI) rebajó el tipo de interés repo en 25 puntos básicos hasta el 7,75% en diciembre, la revisión sobre la política monetaria dejaba claro que el margen existente para una futura flexibilización monetaria es escaso. En efecto, aunque es posible que la inflación haya tocado techo en los últimos meses y se espera que se mantenga dentro del margen establecido, la realidad es que la inflación sigue siendo demasiado elevada. A pesar de que el crecimiento del PIB (ajustado estacionalmente) ha caído muy por debajo de la tasa de crecimiento potencial, el único camino a seguir es una fuerte flexibilización monetaria. El verdadero impulso ha venido dado por el gobierno en términos de contención del déficit fiscal, reducción de las importaciones de oro, aprobación de medidas reformistas como el impuesto sobre bienes y servicios y el código de impuestos directos para mejorar la solidez de los ingresos fiscales y desbloquear el proyecto de ley de adquisición de terrenos durante la sesión presupuestaria de marzo con el fin de obtener un contexto normativo más saludable para el arranque de proyectos de inversión importantes. Asimismo, la India necesita capital extranjero por valor de aproximadamente 80.000 millones de dólares estadounidenses para reducir la brecha de su cuenta corriente, y el RBI debe aportar su granito de arena no reduciendo los tipos de forma demasiado brusca.
Por Nikhil Mohan.