
El Ministerio de Sanidad ha llegado a un acuerdo con la farmacéutica Novartis para aprobar la financiación de la primera terapia génica contra el cáncer que se utilice en España. Se trata del tratamiento Kymriah, una terapia que ha demostrado una eficacia superior al 80% en un tipo de leucemia y otro de linfoma. Según ha podido saber elEconomista, el precio acordado entre Sanidad y Novartis ronda los 320.000 euros por tratamiento, aunque se han negociado varias fórmulas para reducir su precio al cabo del tiempo.
En concreto, el Ministerio y la filial del laboratorio en España han llegado a un acuerdo con un modelo innovador de pago basado en resultados en salud. Así, el precio aprobado para las dos indicaciones siempre estará condicionado a los resultados de salud obtenidos en el paciente. Sólo se pagará ese precio si se obtienen los resultados esperados de curación, aseguran fuentes del acuerdo.
De esta manera, España se sitúa a la vanguardia en a la aplicación de estas terapias celulares. Recientemente, también el Reino Unido llegó a un acuerdo parecido con Novartis para financiar esta terapia a un precio de 282.000 libras por paciente (unos 315.000 euros al cambio), con un descuento adicional. En EEUU, donde las autoridades ya aprobaron estas terapias hace meses el precio supera los 400.000 euros.
En concreto, la terapia aprobada de Novartis está indicada para tratar la leucemia linfoblástica aguda (LLA) de células B refractaria, en recaída post trasplante o en segunda o posterior recaída en pacientes pediátricos y adultos jóvenes de hasta 25 años de edad y para la indicación de Linfoma B difuso de célula grande (LBDCG), en recaída o refractario tras dos o más líneas de tratamiento sistémico en pacientes adultos.
Los oncólogos y hematólogos aseguran que, esta vez sí, estamos ante una revolucionaria forma de combatir el cáncer. Se trata de tratamientos personalizados donde a cada paciente se le extraen células que son modificadas en laboratorio para incluirles un gen capaz de actuar contra las células malignas. Una vez que las células son modificadas, se inyectan de nuevo en cada paciente.