Apuesta prioritaria por la educación presencial en todos los niveles educativos, pero especialmente y de modo completo hasta 2º de la ESO, obligación de mascarillas en el centro desde los 6 años -y recomendación para los niños de 3 a 5-, toma de la temperatura diaria en el inicio de la jornada, distancia de 1,5 metros, lavado de manos cinco veces al día y cuarentena del grupo entero con un positivo de coronavirus. Estas son algunas de las 23 medidas obligatorias aprobadas este jueves en la reunión mantenida entre Sanidad, Educación, Política Territorial y las 17 comunidades autónomas para garantizar una vuelta al colegio segura en plena escalada de la pandemia en España.
La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, ha anunciado un "acuerdo total" con las comunidades autónomas para coordinar las medidas de la 'vuelta al cole', durante la rueda de prensa posterior a la Conferencia Sectorial Conjunta que ha celebrado conjuntamente con los ministros de Sanidad, Salvador Illa, y Política Territorial, Carolina Darias, con los consjeros del ramo.
"Nos permite actualizar el marco común de cogobernanza que genere confianza en la sociedad en su conjunto, buscamos tranquilidad", ha añadido la ministra, que ha señalado que se han pactado 29 medidas y cinco recomendaciónes y ha destacado la "prevención, higiene y promoción de la salud" para una vuelta a las aulas segura".
Según ha recalcado, se ha acordado una actividad lectiva presencial para todos los niveles y etapas del sistema, priorizándola para los más pequeños hasta 2º curso de ESO. Asimismo, los centros se mantendrán abiertos durante todo el curso escolar, con el servicio comedor y el servicio de apoyo a menores con necesidades especiales y en situación de vulnerabilidad. Igualmente, todos los centros designarán un responsable para el covid-19, que deberá estar familiarizada con todos los documentos del coronavirus. Junto con ello, el uso de la mascarilla será obligatoria a partir de los 6 años con independencia de la distancia de seguridad. Habrá grupos estables hasta segundo de Primaria.
Lavado de manos: cinco veces al día
Asimismo, el lavado de manos deberá producirse cinco veces al día y deberá mantenerse informada a las familias y dar formación a los profesionales. Celaá importancia a la ventilación y limpieza y desinfección de las instalaciones, manteniendo con distancia los servicios de comedor y transporte escolar.
Se ha recomendado que la ventilación se realice, siempre que se pueda, de manera continua durante las clases, manteniendo las ventanas abiertas. De no ser posible, las aulas deberán ser ventiladas al inicio y al final de cada clase, durante 15 minutos.
La toma de la temperatura será obligatoria al inicio de cada jornada escolar, y cada CCAA podrá determinar el método para llevarla a cabo, ya sea en el ámbito del hogar o en el propio centro escolar. En el primer escenario, los padres tendrán que firmar una declaración responsables para comprometerse a tomar la temperatura a sus hijos antes de llevarles al colegio. El ministro Illa ha admitido que no han abordado sanciones posibles para los padres que incumplan. "No concibo que un padre o una madre lleven a su hijo con fiebre al centro escolar", ha zanjado.
Los territorios también podrán determinar que este control de la temperatura corporal se realice en el ámbito de los colegios, a la entrada de los centros.
¿Y qué pasa si un niño da positivo de coronavirus?
Los protocolos establecidos ante casos de positivos por coronavirus en los centros escolares se rigen por la regla de actuar desde el nivel de grupo para que, en última instancia, quede la opción extrema de cerrar el centro. Así, si en un grupo estable -como sucede en el nivel de la educación Primaria- se notifica un enfermo de covid-19, será puesto en cuarentena el grupo completo. Si esto sucede en un grupo no estable de convivencia, con alumnos que cambian en diferentes asignaturas, como sucede en Secundaria, se pondrán en cuarentena los contactos estrechos de este alumno en concreto.
"Se podrán tomar medidas en distintos niveles, como cerrar un aula, un ciclo educativo, pero siempre dejando para el último lugar el cierre de un centro de modo temporal, siempre que se constate una transmisión descontrolada del coronavirus", ha subrayado el ministro Illa. Sin embargo, el ministro ha admitido que no existe un criterio técnico mediante el que se determine cuándo esta transmisión está descontrolada y, por tanto, cuándo hay que cerrar todo el centro. "Se tendrá que estudiar caso por caso", ha defendido, y se ha comprometido a "buscar herramientas para una actuación coordinada" entre los centros de las diferentes CCAA.
No habrá pruebas PCR masivas en los colegios
Sanidad ha descartado la medida de realizar pruebas PCR para detectar el coronavirus o análisis serológicos para hallar anticuerpos en los estudiantes. Illa ha recordado que los epidemiólogos no juzgan esta medida útil si se realiza de un modo masivo, y apuntan a cribados en grupos concretos "como se está haciendo hasta ahora".
En el ámbito del transporte escolar, aunque se trata sólo de una recomendación, sería preferible que los escolares llevaran mascarilla en estos desplazamientos, con asientos asignados y fijos que eviten la movilidad de los menores.
Los ministros Illa, Celaá y Darias, en la rueda de prensa.
Celaá también ha defendido el trabajo realizado hasta el momento, en una semana en la que su socio de Gobierno, Unidas Podemos, ha criticado su "falta de liderazgo". Así, ha destacado que se han celebrado cinco conferencias sectoriales, y ha definido la sexta, esta última como una "novedad" en el país por ser conjunta para dar un servicio a la sociedad.
"El objetivo es doble, dar el mayor grado de presencialidad en Infantil, Primaria y parte de Secundaria y conseguir vuelta una segura, saludable y sostenible para toda la comnidad educativa", ha asegurado. Estamos trabajando para arantizar la contiuidad de la formación y hemos trabajado conjunta y coordinadamente respetando la distribución competencial. En esto ciframos la cogobernanza. Hay mucho trabajo hecho porque nuestro objetivo es garantizar el derecho de los menores a la educación en un entorno seguro".
La ministra de Política Territorial, Carolina Darias, ha defendido que la necesidad de "respuestas coordinadas" y ha asegurado que se ha alcanzado un "mínimo común de entendimiento" para abordar el desafío de abrir las aulas en el momento epidemiológico grave actual. Darias ha subrayado que esta actuación común busca ofrecer a los ciudadanos "confianza y esperanza".
La vacunación de la gripe: la primera quincena de octubre
El Ministerio de Sanidad ha acordado con las comunidades autónomas en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) que el comienzo de la campaña de vacunación contra la gripe se realizará al mismo tiempo en todas las comunidades y ciudades autónomas en la primera quincena de octubre, debido a una posible coexistencia con el covi-19.
En circunstancias habituales, esta campaña se inicia a finales de octubre o principios de noviembre, pero Illa ha avanzado en rueda de prensa este jueves que "idealmente" se realizará en la primera semana, para adelantar cuanto sea posible la vacunación.
Gobierno y CCAA han acordado nuevos objetivos con la finalidad de proteger a los más vulnerables. En concreto, recogen el compromiso de alcanzar al menos coberturas del 75% en personal sanitario y mayores de 65 años; y de un 60% en embarazadas y personas con condiciones de riesgo.
Los grupos de población a vacunar frente a la gripe serán los acordados por la Comisión de Salud Pública del CISNS celebrada el pasado 5 de mayo, es decir, en primer lugar, personas mayores, preferentemente a partir de los 65 años de edad, haciendo especial énfasis en aquellas personas que conviven en instituciones cerradas. Después, tendrán prioridad las personas con menos de 65 años de edad que presentan un alto riesgo de complicaciones derivadas de la gripe.
Le seguirán las personas que pueden transmitir la gripe a aquellas que tienen un alto riesgo de presentar complicaciones, incluyendo personal sanitario y sociosanitario, así como convivientes; y, por último, se encuentran personas que trabajan en servicios públicos esenciales y otros.
Illa ha añadido que se comenzará con las personas mayores que están en centros residenciales. Sanidad y CCAA también impulsarán la difusión de publicidad de la campaña para animar a vacunarse, así como se contará con la colaboración de las organizaciones profesionales para realizar estas labores.