Alrededor del 20% de los pacientes con coronavirus desarrolla una infección pulmonar grave y, de ellos, más de la mitad termina necesitando ventilación asistida.
Ante esta situación, unida a la fuerte demanda asistencial, la patronal de la sanidad privada Aspe y el Ministerio de Sanidad llegaron a un acuerdo para que más de cien respiradores que se encuentran en disposición de los centros privados viajen a Madrid para disminuir la presión asistencial que viven los hospitales de la Comunidad en las Unidades de Cuidados Intensivos.
En el acuerdo, según han informado fuentes de la patronal a este periódico, se establece que el equipo se trasladará desde las clínicas oftalmológicas adscritas a Aspe así como de clínicas u hospitales privados de comunidades autónomas que aún no viven la situación crítica que existe en Madrid.
Este acuerdo, que es una donación y que, por tanto, no habrá contraprestación económica, significa un balón de oxígeno tanto para la sanidad pública como para el propio ministerio de Sanidad. Estos equipos estarán a disposición desde ya, mientras que los que ha comprado el Gobierno a China aún tardarán en llegar unas semanas, según reconocieron tanto el ministro de Sanidad, Salvador Illa, como la embajada del país asiático.
Illa: "Se han comprado 950 respiradores a China que llegarán entre abril y junio"
"Se han comprado 950 respiradores a China que llegarán entre abril y junio", decía el responsable de Sanidad a finales de la semana pasada. De hecho, ya el viernes, el portavoz de esta cartera para la crisis del coronavirus, Fernando Simón, aseguraba que las entidades de la sanidad privada habían donado 77 respiradores, cifra que ha ido aumentando en los días posteriores, hasta superar el centenar.
Junto a esta donación, la sanidad privada sigue atendiendo a la llamada del Gobierno para desplegar sus capacidades en la lucha contra el coronavirus, tal y como les compromete el decreto de Alarma. La Fundación IDIS, lobby de este sector, también ha informado de la cantidad de pacientes con COVID-19 que hoy tienen en sus centros sanitarios. "Los centros sanitarios privados acogen al 10% de los pacientes que se encuentran en unidades de cuidados intensivos y casi al 19% del total de pacientes ingresados en España", aseguran. Con las cifras actuales, y en términos absolutos, estos datos señalan que en estas clínicas se encuentan hospitalizados alrededor del 14.000 pacientes.
Desde el IDIS también señalan que sus esfuerzos para atajar la crisis por el coronavirus se están anteponiendo a la visión de negocio que tiene la empresa privada. "Se trata, por tanto, de la firme implicación del sector, teniendo en cuenta además que aún no se ha tenido en cuenta cómo se van a compensar las inversiones que se están realizando, dado que la prioridad en este momento es salvar el mayor número de vidas posible y atender a todos los pacientes que lo necesiten", dicen.
Reconversiones de equipos
Además de la aportación de la sanidad privada para solventar el problema de los respiradores (no hay que olvidar que el ministro de Sanidad señala el pico de afluencia en UCI para mediados de abril, al menos en Madrid), también la compañía alemana Dräger, ha trasladado a las autoridades la posibilidad de adaptar parte de sus equipos para ser utilizados también como respiradores mecánicos.
"Ante esta extraordinaria situación, manifestamos que, del gran número de respiradores de anestesia instalados de su marca en los hospitales españoles, la mayoría de los mismos podrían ser usados como ventiladores de cuidados intensivos de una manera excepcional, ya que incorporan un software adaptado a las necesidades ventilatorias de los pacientes necesitados de ventilación mecánica, siempre y cuando se sigan las instrucciones específicas", comunicaron desde la compañía.