
Almirall compra una molécula en fase de desarrollo a la farmacéutica de moda: Novo Nordisk. La firma de los Gallardo se ha hecho con los derechos de un anticuerpo monoclonal que se podrá utilizar en diversas enfermedades de la piel si los ensayos clínicos tienen éxito. La compañía ha anunciado el acuerdo minutos después de presentar unos tímidos resultados anuales, donde han registrado pérdidas de más de 38 millones de euros.
Según los términos del acuerdo entre ambas compañías, Almirall asumirá el desarrollo global del activo y la futura comercialización. Por su parte, Novo Nordisk recibirá un pago inicial, así como pagos adicionales por hitos comerciales y de desarrollo y royalties escalonados en función de las ventas mundiales futuras, unas condiciones que suelen ser típicas en los acuerdos de compra de moléculas en desarrollo. Sin embargo, lo que no ha trascendido son las cifras exactas del acuerdo entre ambas firmas.
La compañía catalana prosigue así con su estrategia de crecimiento inorgánico. La mayoría de sus productos que vende en el ramo de la dermatología médica, su principal área de negocio, han llegado de la mano de acuerdos comerciales. Es el caso de Wynzonra, Klisiry o su última gran apuesta, lebrikizumab. Ahora, da un paso más con la compra de un anticuerpo monoclonal.
"En Almirall, nos dedicamos a desarrollar los mejores tratamientos posibles para los pacientes que sufren enfermedades de la piel", afirma el Dr. Karl Ziegelbauer, Chief Scientific Officer de Almirall. "Este nuevo acuerdo forma parte de nuestra estrategia de innovación y nos permitirá explorar el bloqueo de la citoquina IL-21 como posible nueva vía para tratar eficazmente una serie de enfermedades dermatológicas", añade.
La noticia del acuerdo ha provocado que la compañía de los Gallardo se dispare en bolsa a pesar de los resultados anuales presentados. Alrededor de las 11 de la mañana, la farmacéutica crecía por encima del 4% en el mercado continuo.