
Rovi prepara el asalto al mercado estadounidense con su último tratamiento para la esquizofrenia. La compañía ultima la búsqueda de un socio local que le permita la comercialización del medicamento en una asociación que podría asemejarse a la de una joint venture, según confirman fuentes de la compañía a este periódico. El anuncio oficial dede esta asociación se producirá en el segundo semestre del año, una vez se haya conseguido la autorización del medicamento por parte de la FDA americana.
La validación por parte de la autoridad estadounidense se está haciendo de rogar. Según comunicó Rovi, el día 27 de julio es la fecha límite para que el organismo se pronuncie a favor o en contra de la comercialización de la terapia. El trámite, sin embargo, está pendiente de una inspección que la FDA realizará a Rovi en Madrid antes de la fecha anunciada, según confirman fuentes de la compañía a este medio.
La llegada del medicamento a Estados Unidos supone un impulso drástico para Rovi. Una vez acabada la pandemia, con el lastre en resultados vistos en el primer trimestre y que se agudizarán en el segundo, conquistar el mercado pretendido es una válvula de escape.
Según los datos, el mercado de la esquizofrenia en Estados Unidos alcanza los 9.000 millones de euros, por lo que el potencial del medicamento es alto. Cierto es que no es el único fármaco contra esta enfermedad y que no alcanzará el pico de ventas hasta dentro de, como mínimo, cinco años, pero en cualquier caso es un motor importante para los ingresos de la farmacéutica ubicada en la Comunidad de Madrid.
El recorrido comercial de esta terapia ya ha comenzado en Europa. En septiembre consiguió la financiación por parte del Ministerio de Sanidad pero también está presente en mercados como el alemán. De hecho, en los resultados trimestrales presentados la semana pasada, Okedi fue una de las pocas buenas noticias relacionadas con las ventas de medicamentos, al doblar sus ingresos apenas cuatro meses después de debutar en el mercado.
Cierto es que parte de la explicación de las bajadas de su mercado clave, las heparinas, tienen una explicación coyuntural. Durante el tiempo que duró la pandemia, la Organización Mundial de la Salud calificó a estos medicamentos como estratégicos para tratar a los enfermos. Esto provocó que las ventas crecieran por encima de la norma de un mercado normal y, ahora, se han juntado dos variables a la vez: el fin de la pandemia y los almacenes llenos de los compradores, que anticiparon las compras durante los ejercicios de 2021 y 2022.