Europa está llevando a cabo una reforma de su legislación farmacéutica. Esta podría abrir la desaparición de los prospectos en papel y limitarlo a un código 'QR' o similares, una medida que revolucionaría la forma en la que los pacientes se informan sobre los fármacos. El Consejo General de Farmacéuticos rechaza la retirada de los prospectos, aunque que ve posible la introducción de este tipo códigos digitales como complemento.
El Consejo General de Colegios Farmacéuticos afirma que los mayores consumidores de medicamentos son los ancianos. Estos se caracterizan por tener una edad avanzada, ser polimedicados y en muchas ocasiones tienen dificultades para acceder a medios electrónicos. Además, en este grupo poblacional existe una brecha digital que podría ser un problema a la hora de acceder a las instrucciones del tratamiento si se eliminan los prospectos en papel.
No obstante, los farmacéuticos sí ven el código QR como una buena herramienta siempre y cuando sea complementaria. "En el caso de la información recogida en el prospecto que acompaña a los medicamentos y su posible reducción a un formato electrónico, en el ámbito comunitario, consideramos que puede ser posible únicamente como medida complementaria al panfleto en papel", afirma el director de los servicios farmacéuticos del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Antonio Blanes. "Es fundamental que la información recogida esté siempre junto al medicamento, no basta con que sea accesible en un formato electrónico", añade.
Entre las ventajas que recoge Bruselas de esta propuesta se encuentra el aumento de simplicidad y la disminución de problemas de escasez de medicamentos. Además, la información disponible podría actualizarse de forma inmediata y se logrará un notable ahorro en papel. Cabe recordar que el pasado otoño la farmacéutica Normon fue una de las compañías que sufrieron la falta de suministro de papel en el mercado.
Sin embargo, eliminarlos también trae consigo inconvenientes. El más destacado es la falta de acceso de información que supondría para las personas mayores. Una de las fórmulas que se ponen sobre la mesa para garantizar el acceso a la información a los pacientes ancianos es el poder solicitar en las farmacias la impresión del panfleto.
Por otro lado, la Comisión Europea quiere que sean los países los que decidan cómo y cuándo dar el paso según los diversos niveles de desarrollo digital de los Estados miembros. Esto supone, por ejemplo, que puedan decidir eliminar el papel solo en los medicamentos de uso hospitalario ya es el personal sanitario el que maneja y administra los fármacos, mientras que el prospecto se mantengan en los de venta en farmacia a pie de calle.
Actualmente en España se está llevando una prueba piloto con medicamentos de uso hospitalario. El proyecto tiene una duración de dos años (actualmente se encuentra en el segundo). Son 20 medicamentos a los que se les ha añadido el código QR. Según fuentes consultadas por este medio, la prueba está dando resultados positivos y de momento no ha tenido ningún impacto negativo en los centros hospitalarios.