
La farmacéutica Novo Nordisk ampliará y expandirá sus instalaciones existentes en Dinamarca, concretamente Bagsvaerd. Para ello, la danesa ha decidido invertir 730 millones de euros (5.400 millones de coronas danesas). Se espera que el proyecto de inversión finalice en 2024 y cree alrededor de 160 puestos de trabajo, según indica la compañía en un comunicado.
Los planes de expansión incluyen la construcción de una nueva planta ubicada en la ampliación de las instalaciones existentes. "Estas expansiones proporcionarán capacidad para desarrollar la futura cartera de productos orales e inyectables de Novo Nordisk", afirma la farmacéutica.
Además, la inversión dará capacidad adicional en Investigación y Desarrollo para la fabricación de ingredientes farmacéuticos activos que serán utilizados en los ensayos clínicos globales de la compañía. "El aumento de nuestra capacidad de API en Investigación y Desarrollo será un factor clave para traer nuevas innovaciones al mercado y satisfacer la demanda futura de nuestros pacientes", afirma el vicepresidente senior de Desarrollo de CMC de Novo Nordisk, Jasper Boving.
El catálogo de áreas terapéuticas de Novo Nordisk incluye la diabetes, tanto de tipo uno como de tipo, la obesidad, trastornos del crecimiento y hemofilia. En octubre del año actual, ante los problemas de suministro de los principales tratamientos para tratar la diabetes tipo dos (entre los que se incluía su fármaco Ozempic) que sufría España, la farmacéutica explicaba que estaba habiendo una creciente demanda de su medicamento. La danesa explicaba a elEconomista.es que la situación había provocado que el fármaco esté disponible intermitentemente, situación que se puede prolongar durante 2023. Además, añadía que "de momento" siguen recibiendo suministro en España y están "siguiendo de cerca el stock para garantizar que se distribuya lo más rápido posible".
Por otra parte, en septiembre de 2022, la danesa compró la compañía estadounidense Forma Therapeutics por un valor patrimonial total de 1.100 millones de dólares (1.070 millones de euros). Se trata de una biofarmacéutica en etapa clínica enfocada en transformar la vida de los pacientes con enfermedad de células falciformes y trastornos sanguíneos raros. La adquisición forma parte de la estrategia de Novo Nordisk de complementar y acelerar su presencia científica y su cartera de proyectos de hemoglobinopatías.