El sindicato de Enfermería, SATSE, ha emitido un comunicado en el que se refleja la realidad que experimentan los hospitales del territorio nacional: España solo dispone de 3 camas por cada mil habitantes en sus centros hospitalarios públicos. Esta situación es fruto de la continua desinversión a lo largo de los últimos 20 años en recursos y medios en los hospitales, según explica el sindicato. Desde principios de los años 2000, los sucesivos gobiernos han ido disminuyendo el número de camas en funcionamiento en los hospitales públicos hasta llegar a las cifras actuales.
La media europea es de 4,5 camas por mil habitantes. Estos números sitúan a España a la cola de Europa, por detrás de países Alemania y Austria, que cuentan con más de siete camas por cada mil habitantes. Otros territorios como Hungría, República Checa, Lituania o Polonia tienen más de seis camas por mil habitantes.
La postura perjudica gravemente la atención y cuidados que se deben prestar a los más de 47 millones de habitantes que viven en el territorio español. Irlanda, Islandia, Dinamarca, Reino Unido y Suecia son los únicos países que se sitúan detrás de España, según el informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) "Health at a Glance 2021".
Desde el sindicato explican que, a pesar de que la pandemia constató la necesidad de contar con el número suficiente de camas en los centros hospitalarios, las distintas administraciones sanitarias públicas siguen sin reaccionar y mantienen su tendencia a la desaparición de más camas. "Este verano, por ejemplo, han vuelto a decidir que la mejor manera de ahorrar costes es cerrar de manera temporal miles de camas en todo el país, además de suspender intervenciones quirúrgicas y pruebas diagnósticas", añaden.
España es uno de los países europeos que menos invierte en sanidad. De hecho, según los últimos datos disponibles, solo destina un 6,5% del PIB al gasto sanitario público, mientras que otros países del entorno dedican el 8 y el 9%. En el año 2020, España se situó en el puesto número 14 de 27 en inversión sanitaria pública por habitante, por debajo de países como República Checa o Malta. El 'peso pesado' del bloque europeo, Alemania, casi dobló en gasto a España, mientras que a la cabeza de la lista se situó Luxemburgo, con más de 6.000 euros per cápita.
Del diagnóstico actual de la sanidad pública saca provecho el sector privado. Según el último informe publicado por la Fundación IDIS, patronal del sector sanitario privado, la privada ya cuenta con el 32% de las camas en funcionamiento del Sistema Nacional de Salud (SNS). La facturación de los centros hospitalarios privados registró un crecimiento del 5,1% en 2021. "Mientras la sanidad pública se descapitaliza, la sanidad privada ve nuevas oportunidades de negocio que aprovecha, a través de acuerdos y conciertos, para incrementar sus beneficios", afirman desde SATSE.
El Sindicato de Enfermería recuerda que el conjunto de partidos políticos acordó en julio de 2020, en la Comisión para la reconstrucción social y económica de nuestro país del Congreso de los Diputados, incrementar el número de camas hospitalarias públicas. Por esta razón, exigirán a las distintas administraciones públicas que aumenten la inversión en sus próximos presupuestos de 2023 a las partidas correspondientes para dotar a los centros hospitalarios de los recursos y medios suficientes.
"El sistema sanitario español es un sistema relativamente eficiente. Es un modelo que gasta poco desde el punto de vista del PIB. Que la cuarta parte de la población tenga que buscar una solución en la privada cuando está pagando impuestos en la sanidad pública es algo que tenemos que replantearnos", concluía Ángel de Benito, secretario general de la Fundación IDIS, en la presentación del último informe de la patronal.