La Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC), la agencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dedicada a la lucha contra el cáncer, acaba de calificar el talco como "probable cancerígeno". Así lo ha expresado en un comunicado hecho público este viernes, en el que sustenta la afirmación en un artículo científico publicado en la prestigiosa revista The Lancet Oncology.
"Después de revisar exhaustivamente la literatura científica disponible, el grupo de trabajo de expertos internacionales ha clasificado el talco como probablemente cancerígeno para los humanos", indica la agencia de la OMS en su comunicado. No obstante, esta calificación esconde en su argumentación algunas limitaciones.
IARC has evaluated the carcinogenicity of talc & of acrylonitrile.
— IARC (@IARCWHO) July 5, 2024
The outcome of the assessment has been published in a summary in @TheLancetOncol & will be described in detail in Vol. 136 of the Monographs, to be published in 2025.
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Según se indica en el mismo comunicado, la base científica sobre la que se ha tomado esta decisión es "limitada" en humanos, aunque "suficiente" sobre animales de experimentación y "fuerte" evidencia mecanicista de que "el talco exhibe características clave de carcinógenos en células primarias humanas". Es decir, sobre todo está sustentado en la teoría, así como en la práctica con animales, aunque no tanto con seres humanos.
Cáncer de vejiga
La exposición al talco se produce principalmente a través del uso de cosméticos y polvos corporales. Y en concreto, la agencia sospecha que este mineral podría tener influencia concretamente sobre el cáncer de ovarios. "Hubo numerosos estudios que mostraron consistentemente un aumento en la incidencia de cáncer de ovario en humanos al usar talco corporal en la región perineal", explica el comunicado. Del mismo modo, la IARC indica que aunque "la evaluación se centró en talco que no contenía amianto, en la mayoría de los estudios realizados en seres humanos no se pudo excluir la contaminación del talco con amianto".
Como resultado, la IARC dicta en su comunicado que no se ha podido establecer completamente el papel causal del talco (de ahí la calificación de 'probable cancerígeno').
Valoraciones del comunicado
Alejandro Pérez Fidalgo, médico del Servicio de Oncología del Hospital Clínico de Valencia e investigador del INCLIVA Biomedical Research Institute, aclara al Science Media Center España que "Eso no significa que, porque alguien se haya puesto talco alguna vez o incluso que por que lo use con cierta regularidad, esté claramente en riesgo, ya que el riesgo de generar un cáncer va a depender de dosis de exposición, tiempo y forma de contacto con el talco".
También en declaraciones al SMC, Andrew Watterson, investigador en Salud pública de la Universidad de Stirling (Escocia), avala esta decisión, ya que "se basa en un cuidadoso examen de las pruebas". "Los consumidores y los trabajadores deberían tener acceso a la información de la IARC para ayudarles a tomar sus propias decisiones sobre qué utilizar cuando haya opciones disponibles".
El acrilonitrilo, 'cancerígeno'
Junto con la clasificación del talco como "probablemente cancerígeno", la IARC también ha clasificado el acrilonitrilo como "cancerígeno". El acrilonitrilo es un compuesto utilizado en la producción de polímeros y presente en fibras para ropa, alfombras y otros textiles, así como plásticos para productos de consumo, piezas de automóviles y construcción, y especialmente en el tabaco. La evidencia recogida por la agencia de la OMS es suficiente para afirmar que este compuesto provoca cáncer de pulmón. También han encontrado evidencia menos contundente que lo vincula con el cáncer de vejiga.