
Existe un método filosófico que deriva del estoicismo. Esta rama tiene como premisa no empeñarse en ver un problema dónde no lo hay y recomienda esforzarse en verlo desde el otro lado, no entenderlo como un problema sino como una posibilidad. Se conoce como omdenken (pensar al revés en neerlandés) y también es el nombre del libro del escritor Berthold Gunster.
Básicamente es ver los problemas como oportunidades, cambiar el pesimismo en optimismo. Este método promete el bienestar inmediato. El autor lo llama pensar al revés y así uno se prepara ante los posibles acontecimientos futuros negativos.
Ver los problemas como oportunidades
Marco Aurelio lo explicó en su día: "Así como la naturaleza toma cada obstáculo, cada impedimento, y trabaja con ellos (los convierte en sus propósitos, los incorpora a sí misma), también un ser racional puede transformar cada adversidad en materia prima que usar para lograr sus metas".
Gunster utiliza esa idea para decir que cambiar de perspectiva "nos ayuda a ver los problemas de una forma diferente, más ligera y más creativa".
Para llevar a cabo el omdenken, hay que empezar poniéndolo en práctica en problemas más pequeños y luego en más grandes. También hay que asumir lo que no puedes cambiar y centrarse en los que se tiene influencia.