Con la bajada de las temperaturas en varios puntos de España, es normal que nos apetezca una taza caliente de chocolate. Y es que no hay nada más placentero en la vida que disfrutar de esta bebida mientras estamos con la familia, leemos un libro o vemos alguna película de la televisión.
Ahora bien, también hay que 'reservarse' ganas para el periodo navideño, donde esta bebida se convierte -como por arte de magia- en una de las más demandadas en las cafeterías y bares de nuestro país tanto por los más pequeños como por los más grandes. Y si es acompañada de churros, casi que mejor.
Beneficios
Pese a que muchos españoles y españolas consideran que esta bebida no es buena para la salud, lo cierto es que posee multitud de beneficios. Estos son:
- Antioxidante. La temperatura caliente y el cacao ayudan al corazón y tienen un impacto positivo en el organismo.
- Fuente de calcio. Esto hace que nuestro cuerpo funciones correctamente.
- Reduce el estrés. Minimiza la tensión acumulado y produce una sensación de alivio.
- Mejora el estado de ánimo al estimular la producción de endorfinas y serotonina.
- Proporciona energía rápida a partir de carbohidratos, convirtiéndolo en una fuente conveniente de combustible.
- Mejora la salud de la piel.
- Activa la circulación sanguínea.
- Mantiene saludable el cerebro.
- Disminuye la inflamación. Sobre todo la retención de líquidos.
El aspecto más destacado
Pero esto no es lo más importante. Esta bebida tiene un efecto cardioprotector y sus propiedades antioxidantes ayudan a nuestra capacidad cognitiva y, en definitiva, a la memoria. Es decir, mejora en una gran proporción nuestra capacidad para la resolución de conflictos, la atención y el aprendizaje.
¿Y a qué se debe? Pues bien, está claro: a los flavonoides. Una dieta rica en ello, entre otras cosas, claro está, protege el envejecimiento cognitivo al promover la oxigenación en el cerebro, reduce la viscosidad de la sangre, mejora la capacidad de respuesta de los vasos sanguíneos y reduce la inflamación.