Madrid
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un reparto de 229,4 millones de euros para reforzar la Atención Primaria y la salud mental en España, destinando 172,4 millones a lo primero y un total de 57 a lo segundo.
Con la transferencia de los fondos de 172 millones a Atención Primaria (AP) se busca, sobre todo, mejorar las condiciones de los profesionales y reforzar la longitudinalidad, esto es la relación médico-paciente extendida en el tiempo. Así lo ha expresado la ministra de Sanidad, Mónica García, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros: "La AP es el eslabón fundamental del sistema sanitario, el corazón del sistema. Resuelve el 80% de los problemas de salud de la población y por sus consultas pasan el 80% de los españoles".
Una de las acciones más importantes que se activarán con esta partida presupuestaria, recogida a su vez en el Plan de Atención Primaria 2025-2027 aprobado recientemente entre el propio Ministerio y las CCAA, es el uso de la inteligencia artificial (IA) en las consultas mediante el uso de herramientas como la transcripción. "Somos conscientes de la barrera que suponen los dispositivos electrónicos en las consultas. El médico no te puede mirar porque está leyendo la historia clínica y escribiendo. Se trata de mirar a la cara a los pacientes y de crear una relación en la que poder diagnosticar con más humanidad", ha expresado García. "Tenemos la tecnología y los profesionales. Podemos remover esas barreras en nuestras consultas", ha agregado.
Precisamente en relación con los pacientes, otra medida que ha destacado la ministra es la introducción de la interoperabilidad de las historias clínicas, a fin de que todos los facultativos tengan acceso a la misma, independientemente del territorito español donde se encuentren. Por otro lado, se pondrán en marcha programas para detectar de forma temprana los casos de violencia machista en las consultas.
No obstante, la mitad de estos fondos está sujeta a condiciones. Es decir, para recibirlos, las CCAA deben cumplir una serie de requisitos, que redundan en una mejora de las condiciones laborales de los profesionales: por un lado, ampliar las plazas de ofertas empleo publico de Atención Primaria, así como de enfermeras especialistas en este nivel asistencial y, por el otro, imponer medidas para cubrir los puestos difícil de cobertura.
Por último, García ha incidido en que son los territorios los que deben gestionar las distintas acciones. "Es un impulso extra que damos desde el Gobierno, sin olvidar que las CCAA tienen la competencia para gestionarlos. Esto es una aportación del Gobierno que no sustituye las competencias de las CCAA", ha remachado.
Así, Andalucía es la comunidad que más dinero recibirá, en total 30,9 millones de euros, entre el reparto fijo y el reparto condicionado. Le sigue Cataluña con 29 millones de euros; Madrid (25,2); Comunidad Valenciana (19); Galicia (11,8); Castilla y León (10,5); Canarias (8,8); Castilla-La Mancha (8); Aragón (5,6); Murcia (5,4); Asturias (4,5); Baleares (4,5); Extremadura (4,3); Cantabria (2,3); La Rioja (1,2), e INGESA 638.000 euros.
Plan de Salud Mental
En lo que respecta a la salud mental, el Ministerio de Sanidad ha cumplido con lo que anunció en el pasado mes de marzo y destinará un total de 17,8 millones para el Plan de Prevención del Suicidio. Entre las medidas, destacan el impulso de campañas de concienciación; así como de programas para fortalecer el bienestar emocional en personas mayores, colectivos LGTBIQ+ y quienes se encuentren en exclusión social. También se atenderá a las personas cuidadoras y se implementarán medidas de apoyo a personas que han perdido a un ser querido por suicidio.
En este sentido, también promoverán la reforma de las urgencias en los hospitales generales para adaptarlas a personas en situación de crisis de salud mental. Se crearán dispositivos comunitarios de prevención dirigidos a personas con riesgo identificado.
Por otro lado, se dedicarán 39 millones para financiar las actuaciones del Plan de Acción de Salud Mental 2025-2027. "Nos preocupa la falta de profesionales para atender con tiempo el sufrimiento; que las CCAA no sean capaces de retener el talento; nos inquieta ver cómo se dispara el consumo de psicofármacos, sobre todo en jóvenes y en mujeres adolescentes, que todo el sufrimiento no se convierta en una pastilla por defecto", ha declarado García.
Por ello, ha recordado que una de las actuaciones que se recogen en este plan es la promoción de un uso más racional de los psicofármacos, además de la garantía de una atención "respetuosa" y que "no vulnere los derechos humanos de las personas".