
Las Comunidades Autónomas (CCAA) del PP han rechazado el Plan de Salud Mental promovido por el Ministerio de Sanidad, que se presentaba este viernes en el seno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS). Estos territorios se han amparado en una carta de la Sociedad Española de Psiquiatría, que, entre otros puntos, rechazaba el concepto de "deprescripción" de psicofármacos incluido en el Plan, abogando por sustituirlo por la expresión "uso racional".
"Solicitamos (…) la sustitución del término 'deprescripción' por 'uso racional de psicofármacos', si bien hemos podido comprobar que en el documento final se mantiene el término inicial, con el consiguiente estigma y perjuicio para las personas que requieren tratamientos farmacológicos a largo plazo", reza en el documento que han enviado al Ministerio de Sanidad.
En rueda de prensa, la ministra de Sanidad, Mónica García, ha acusado al PP de "boicotear" su propio Plan. En este sentido, ha explicado que el objetivo del polémico epígrafe es "poner el foco en aquellos pacientes que ya no necesitan el psicofármaco y no se le quita"; esto es, ir retirándolo poco a poco. "A veces se queda ahí sin necesitarlo. Pero esto no tiene nada que ver con el uso racional", ha matizado la ministra, para recordar que España es el país con mayor consumo de ansiolíticos y antidepresivos. "Por ello, hay que hacer un uso racional y ver si estamos prescribiendo por encima de las patologías que tenemos", ha señalado.
Ahora, el Plan volverá al plano técnico para su revisión, y el siguiente paso es presentarlo en un futuro pleno del CISNS. "Es incomprensible que el PP, en contra del el criterio de sus técnicos, vote en contra de un documento en el que han trabajado el Ministerio y las CCAA. Es el plan en el que venían trabajando ellas mismas. Por tanto, el PP vota contra sus propios técnicos", ha zanjado, insistiendo en que "no es un plan para el Ministerio, sino para la ciudadanía". En este sentido, ha afeado al PP que haya ido al CISNS para "hacer oposición". "Para eso está el Congreso", ha recalcado.
El Plan lleva elaborándose casi un año con todas las CCAA y con la aportación de más de 32 sociedades científicas, profesionales y asociaciones de usuarios y pacientes. "El Plan no responde a una visión partidista, sino que está basado en la evidencia y el consenso profesional. Después de este bloqueo del PP, desde Sanidad seguiremos dialogando y tratando tener el máximo respaldo posible", ha señalado la ministra.
Las comunidades del PP también han alegado, al igual que los psiquiatras, que el documento también habla de "disminuir" la plantilla de profesionales dedicados a la salud mental. En el documento, no obstante, se recoge que, para llegar a los objetivos que se proponen, es necesario llegar a un mínimo de cobertura del 90% de las plazas de salud mental que ofertan las CCAA.
"El plan habla de aumentar la plantilla y nosotros ponemos unos mínimos a partir de los que tenemos que aumentarla. De la oferta de plazas que dan las CCAA, como mínimo, tenemos que sacar el 90%. Por tanto, son las CCAA las que tienen que ampliar las plazas acreditadas", ha apostillado García, incidiendo en que el ministerio apuesta por el "aumento de los recursos".
Otro de los puntos en desacuerdo se refiere a la financiación. El Ministerio apostó por omitir expresamente las líneas de financiación dentro de los planes e incluirlas más adelante en otra reunión. En el encuentro de este viernes, el Ministerio ha planteado una financiación de 38 millones para el primer plan y otra de 18 para la estrategia contra el suicidio.
En definitiva, los objetivos del documento pasaban por reforzar los recursos humanos en salud mental; orientar el modelo asistencial hacia un modelo más comunitario; garantizar el uso racional de psicofármacos; y promover la vigilancia epidemiológica en salud mental, entre otros.
Aprobación del Plan de Prevención del Suicidio
Con todo, las CCAA no se han atrevido a tocar el Plan de Prevención del Suicidio 2025-2027 y, a diferencia del de Salud Mental, sí se ha aprobado en el seno del CISNS. Entre las medidas más importantes, destacan el refuerzo de la línea telefónica 024, reforzando su conexión con otros servicios asistenciales.
Además, también se ha creado un Observatorio para la Prevención del Suicidio, un organismo que recopilará y analizará información detallada sobre conductas suicidas para orientar las estrategias de intervención.