
El sector sanitario privado pone encima de la mesa sus cifras económica. Los ingresos de la sanidad privada alcanzan los 75.134 millones de euros, que equivale al 5,58% del Producto Interior Bruto (PIB), según el informe "Monitor de la Actividad Empresarial en el Sector Sanitario", elaborado por Idis.
Si se analiza por subsectores, la industria farmacéutica es la que más ingresa. En concreto, 27.442 millones. Le siguen los hospitales privados que generan un volumen de negocio de 12.400 millones y los seguros de salud con 10.908 millones. También la tecnología sanitaria - que ha incrementado su mercado un 7% y el empleo un 5% - ingresa más de 10.000 millones de euros, entre otros.
El gasto sanitario representa el 10,8% del Producto Interior Bruto (PIB). Entre el 54 y 58% del gasto sanitario total precisa de los servicios del sector privado, es decir, requiere una colaboración público-privada, según el informe."Si no existiese la colaboración público-privada, no habría sistema sanitario. El sector público y privado son vasos comunicantes y que afecte la demanda en uno de ellos también afecta al otro", afirma el presidente de Idis, Juan Abarca.
La sanidad privada está compuesta por casi 200.000 compañías, que representan el 5,7% del tejido empresarial español. Además, emplea a 1,1 millones de personas, es decir, el 7,65% de la plantilla de trabajadores total del país. Es más, tres de cada cinco son mujeres.
Posee en sus manos más de la mitad de los hospitales – el 55,6% concretamente – y tres de cada diez camas que ocupan los pacientes ingresados. También atesora siete de cada diez centros sociosanitarios. "Aportamos el 3,2% del PIB y damos trabajo a casi 400.000 personas", afirma el presidente de la Alianza de la Sanidad Privada Española (Aspe), Carlos Rus.
La sanidad privada se encarga de realizar el 31% de las operaciones. "Realizamos una de cada tres cirugías complejas", apunta Rus. Además, llevan a cabo el 24% de las altas y el 24% de las consultas de Urgencias. También nueve de cada diez ambulancias que prestan servicio son privadas, según el informe de IDIS.
Hoy en día, muchas personas deciden contratar un seguro privado debido a la situación de colapso que padece la sanidad privada. En 2022, 12 millones de personas pagaban este servicio. De ellos, 1,7 millones eran funcionarios, el 82% de los usuarios de Muface – que pueden escoger entre ser atendidos en la sanidad pública o en la de pago -.
Según apunta el secretario general de la patronal de los aseguradoras Unespa, Luis Miguel Ávalos, "hace dos años 700.000 asegurados presentaban problemas de salud significativos o graves. Eran el 5,73% de la cartera de usuarios. Estas personas generaron más de la mitad de la siniestralidad atendida por las aseguradoras de salud".
Para 2050, el número de ciudadanos europeos mayores de 80 años se triplicará, lo que apunta a un reto demográfico en el que el sector privado del cuidado de personas mayores tiene un papel fundamental, según la secretaria general de Aeste (Asociación Estatal de Servicios Residenciales de la Tercera Edad), Josune Méndez de Cruz.
Hoy en día, más del 70% de las residencias y casi el 60% de los centros de día en España son privados. "El sector privado del cuidado de las personas mayores evita el colapso del Sistema Nacional de Salud reduciendo la presión asistencial", apunta Méndez de Cruz. "Pretendemos crear para 2030 siete millones de empleos nuevos en Europa", agrega.
La industria farmacéutica es un motor relevante en la sanidad privada. De hecho, cuenta con una red de 149 plantas para la producción de medicamentos y es la tercera fuerza exportadora del país.
España es líder en la investigación de terapias innovadora, y en gran parte es gracias al sector privado, según plasma el informe de Idis. Y es que, uno de cada cinco euros que se invierten para investigar y desarrollar medicamentos provienen de las farmacéuticas. De hecho, el 86% de los ensayos clínicos son financiados con dinero privado y más de la mitad de los hospitales privados participan en ellos. Como resultado, el 34,8% de las patentes son de carácter privado.
Cabe subrayar que los fármacos traen consigo beneficios "importantes". Por un lado, el avance en la esperanza de vida es gracias a los medicamentos innovadores que han salido al mercado en los últimos años. Además, tienen un valor social en aspectos económicos ya que el medicamento evita por ejemplo las bajas laborales, según explica el subdirector general de Farmaindustria, Javier Urzay.
Por otro lado, en cuanto a la formación de los profesionales, el 27,7% de los estudiantes se gradúan en centros privados. "Hay un amplio margen de mejora en el MIR para que se formen en el ámbito privado. La sanidad privada tiene que ser una parte fundamental", afirma Carlos Rus.
"Sin iniciativa privada no hay fármacos ni vacunas. Tampoco hay gases medicinales, transporte sanitario, tecnología diagnóstica ni terapéutica, ni recursos asistenciales suficientes para dar respuesta a la demanda", termina diciendo la directora general de la Fundación IDIS, Marta Villanueva, en la presentación del informe.