
Los tambores de guerra vuelven a tronar en las entrañas de Grifols. El fondo Melqart Opportunities Master Fund ha desembarcado en el accionariado de Grifols con la compra del 1,12% del capital de la farmacéutica a través de derivados. Si bien el nombre puede resultar desconocido para el gran público, este fondo fue el responsable de dar la estocada a varias empresas que estuvieron en el Ibex, como Banco Popular o Abengoa. Melqart también intentó pescar en su día en OHLA, antes de la llegada de los Amodio, y también se colocó en Prisa. El hedge fund entra en esta ocasión en Grifols con un derivado esperando a que la acción suba y poder sacar un beneficio del mismo al final del periodo acordado.
El aterrizaje de Melqart se produce en uno de los momentos más delicados para la farmacéutica desde que comenzó el ataque de Gotham City. Hoy, el mercado aguarda expectante la llegada del ocho de marzo. Esa es la fecha del calendario marcada en rojo para ver la publicación de informe de auditoria de KPMG sobre las cuentas de Grifols, sobre las que recae la sombra de la duda desde que la consultora pusiera en tela de juicio tanto los números de la farmacéutica como las vinculaciones económicas con la familia fundadora. Aunque en ocasiones pasadas el hedge fund Melqart ha apostado a la baja en otros valores esta vez entra en Grifols con su fondo de oportunidades apostando por la farmacéutica, esperando a que su cotización suba y poder sacar un beneficio de ese repunte.
Además de lo que pueda decir la auditoría de KPMG, Gotham publicará un nuevo informe que acompañe al conocido este martes seis de marzo. En el documento que filtró la consultora a través de su web se puede observar que se trata de se trata del documento uno de dos, es decir, que habrá una segunda versión. De hecho, en este informe se hacía hincapié en las relaciones entre la empresa, el vehículo inversor de la familia, Scranton, y una de las empresas puestas en tela de juicio por estar consolidadas en las cuentas de las dos firma mencionadas: Haema.
Desde el ocho de enero, la compañía vive los peores momentos de su historia. El primer informe de Gotham fue demoledor para la empresa de hemoderivados, pero la semana pasada, la propia compañía se provocó un harakiri con la presentación de unos resultados sin la rúbrica del auditor, primero, y una torpe comunicación posterior sobre los mismos, donde se deslizó que la farmacéutica no generaba flujo de caja. Para frenar la sangría bursátil, Grifols reiteró en diversas ocasiones que el 8 de marzo estaría el informe consolidado de KPMG, el último que hará esta consultora, ya que el año que viene la tarea recaerá sobre Deloitte.
Grifols hoy se comporta de forma irregular en el Ibex. Al comienzo de la sesión, la empresa llegó a dejarse un 3%, pero sobre las 12 del mediodía, justo cuando se ha conocido la entrada del fondo Melqart, la acción se ha dado la vuelta y sube un 2,17%. Con todo, los analistas siguen confiando en el título.
Para el mercado todavía queda una fecha más, si bien hoy es desconocida. Grifols, sobre todo, y Gotham City están siendo investigadas por la Comisión Nacional del Mercado de Valores para comprobar si la presentación de resultados de 2022 estuvo bien hecha. Si la farmacéutica recibiera un revés del supervisor, sería un golpe difícil de asumir para la empresa. Con todo, cabe recordar que la firma de hemoderivados es una empresa catalogada como estratégica por la dependencia europea (y española) de productos plasmáticos.
Glanzmann y la familia Grifols compran acciones
El presidente ejecutivo y CEO, Thomas Glanzmann, Raimon Grifols, y el abogado y miembro del consejo de administración, Tomás Dagá, se han hecho con un paquete de acciones antes de la presentación de las cuentas auditadas de Grifols. Las operaciones de compra se han efectuado los días 6 (Raimon y Dagá) y 7 de marzo (Glanzmann), según recoge la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
El importe total invertido entre los tres directivos es de 1,2 millones de euros por un total de 182.000 títulos de la farmacéutica. El dirigente que más ha comprado es Dagá, que se ha dejado en la operación 660.000 euros por un total de 100.000 acciones. Por detrás se sitúa Glanzmann, que ha invertido 352.500 euros por 52.000 acciones. Por último, Raimon ha comprado 30.000 títulos por 196.500 euros. Se trata del primer apoyo del Consejo desde que estalló la crisis por Gotham.