
El cannabis medicinal está cada vez más cerca de la realidad. El Ministerio de Sanidad ha arrancado el trámite para regular su utilización en España. Ha sacado a consulta pública un Real Decreto, que estará abierta hasta el 4 de marzo. No obstante, todavía falta por detallar los detalles de la norma, aunque se basará en un informe que elaboró el Congreso de los Diputados.
Actualmente únicamente hay dos medicamentos, a base de cannabinoides, autorizados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps). En concreto, uno para la esclerosis y otro para la epilepsia. El Real Decreto ampliará su utilización farmacológica, según el informe. Por un lado, podría utilizarse para reprimir las náuseas y vómitos en pacientes con cáncer y para aumentar el apetito y atenuar la pérdida de peso en personas con algún tipo de tumor o que padezcan Sida. Además, podría usar para inhibir el dolor – principalmente crónico – neuropático, oncológico, posoperatorio o de migrañas. También para impedir la rigidez muscular y las convulsiones en epilepsias refractarias a otras terapias.
La sustancia sería preparada en las farmacias – ya sea estandarizada o fórmula magistral, y preferentemente suministrada en los hospitales. Es más, solo podrá prescribirlo el médico especialista en las respectivas patologías. Cabe subrayar que no será un tratamiento de primera línea, sino que primero se probarían otras opciones y si no funcionasen se pasaría a esta.
Asimismo, en el documento el Congreso de los Diputados recomienda llevar a cabo un registro centralizado de los pacientes que se traten con estos nuevos preparados para poder evaluar los resultados obtenidos. El objetivo de esta medida es evitar que el uso terapéutico del cannabis destinado a pacientes con indicaciones concretas se confunda con una invocación al uso general de esta sustancia por parte de la población. En este sentido, se harían evaluaciones periódicas para comprobar su eficacia y también, se dotará a la norma de la suficiente flexibilidad para que pueda ser ampliada si así se requiere en el futuro.
Según el departamento de Mónica García, la regulación planteada es "garantista" respecto a la calidad de los productos y seguridad de los pacientes. También contempla la administración de estas sustancias "vía oral por ser la más adecuada en términos de efectividad terapéutica y seguridad para los pacientes".
España y el cannabis medicinal
Hasta los años 60 las personas podían comprar cannabis y sus derivados libremente siempre y cuando fuese para un fin terapéutico. Sin embargo, desde finales del siglo XX su utilización, en general, está prohibida. No obstante, hoy en día, el escenario está cambiando y en muchas partes del mundo se está volviendo a regularizar su utilización.
En España se creó la Subcomisión del Congreso de los Diputados para el Estudio de la situación de este tipo de productos en el resto de Europa. Además, se encargó a la Aemps que definiera una hoja de ruta de cómo se pueden utilizar estos productos en el sistema español. La autoridad pasó este documento al Ministerio de Sanidad, que tenía que sacarlo a consulta pública en noviembre de 2022. No ha sido hasta el día de hoy que se ha producido este hecho.
El departamento de García defiende que con la regulación España pasa a asemejarse a países del entorno europeo que disponen de normativas que permiten el uso del cannabis medicinal. Un ejemplo son Portugal, Reino Unido o Noruega. También se posiciona en la línea de la Organización Mundial de la Salud y Naciones Unidas, que reconocen las potencialidades terapéuticas de estos compuestos."Permitirá contribuir a generar más y mejor evidencia sobre el uso de cannabinoides con fines terapéuticos", indica.
Según el Instituto Nacional de Estadística, casi el 90% de los españoles están a favor de su regulación. Es más, los pacientes acuden al médico solicitando tratamientos a base de cannabinoides. De hecho, los expertos indican que en una consulta de 20 pacientes, raro es el sujeto que no dice que está tomando esta sustancia.