
El desarrollo de nuevos fármacos, tratamientos y dispositivos médicos o del sector de la salud es una de las actividades económicas más importantes en Catalunya. Barcelona, convertida en una de las capitales globales del mundo health tech cuenta con un buen puñado de empresas importantes que han nacido en busca de innovar para acercar lo último en tecnología y procesos al sector y, en última instancia, a la sociedad. Una de estas firmas es Specipig, nacida hace 10 años para acompañar a las empresas farmacéuticas y las desarrolladoras de dispositivos médicos en su camino hacia el mercado ofreciendo la posibilidad de probar sus productos. "Lo que hacemos es acompañar a las empresas en el proceso que hay entre el diseño y el lanzamiento al mercado de sus productos con todo el soporte que necesitan", concreta Jaume Amat, director general y fundador de Specipig.
La característica distintiva de esta compañía es haber desarrollado una subespecie de cerdo enano para realizar pruebas y ensayos clínicos. "En 2006 estuve en contacto con el modelo porcino y pude ver las bondades del mismo y las carencias en cuanto a modelos e instalaciones para realizar pruebas con ellos. Vimos en estas carencias la oportunidad de crear un centro especializado para dar soporte a las empresas", argumenta Amat.
El cerdo es un animal muy cercano al ser humano y, por tanto, realizar pruebas con el modelo porcino arroja resultados más precisos. No obstante, un cerdo adulto puede llegar a pesar 400 kilos, hecho que provoca que no se pueda considerar para ensayos de largo recorrido. En ese sentido, Specipig ha logrado la solución ideal al desarrollar una nueva especie de cerdo para sus estudios que no supera los 35 kilos cuando es adulto.
El negocio de Specipig, sin embargo, va mucho más allá del ensayo con cerdos. "Tenemos tres pilares", detalla Amat. "La primera es el modelo animal, con la línea propia de cerdo enano", empieza. "La segunda son nuestras instalaciones, específicas para dar respuestas a las necesidades que tenemos para dar soporte a la investigación y desarrollo de nuestros clientes", añade. "La tercera es que hemos creado un equipo especializado que puede ofrecer todo lo que necesitan las empresas", acaba.
Specipig dedicó sus primeros cinco años de vida a validar su modelo
En ese sentido, Amat explica que "los primeros cinco años de vida fueron para validar el modelo, para ver si la necesidad que tenía el sector a nivel teórico tenía sentido como proyecto e ir modulando la idea según las necesidades del mercado". Desde entonces, la compañía "está en la parte de consolidación de modelo, equipo e instalaciones, incorporando perfiles con experiencia y ofreciendo un servicio cada vez mejor.
Desde su nacimiento, Specipig ha trabajado en multitud de proyectos, algunos de los cuales han llegado al mercado. "Hemos participado en estudios, por ejemplo, de regeneración de la mácula en el ojo. Estuvimos trabajando con una empresa que desarrollaba un tratamiento específico celular del tejido que ha tenido buenos resultados", dice. "Otro ejemplo podría ser un proyecto en el que trabajamos probando implantes dentales muy específicos para mandíbulas muy degradadas por la edad", añade.
Son varios casos de éxito y, según admite Amat, es en su papel en los avances de la ciencia donde encuentran el principal atractivo de su compañía. "Vemos de forma directa los fármacos o dispositivos médicos del futuro. Los vemos unos cinco años antes de que lleguen al mercado. Ver que estamos en esta cadena de desarrollo de nuevas soluciones, ayudando a las empresas a que hagan este camino, antcipando problemas y ofreciendo un soporte preciso y con valor es muy estimulante para nosotros", detalla.
Specipig colabora en soluciones como la tecnología 3D
Además, la tendencia hacia un modelo más tecnológico del sector de la salud ayuda a Specipig. "Toda esta innovación que se está haciendo y las empresas que apuestan por ella permite que estén llegando al mercado tecnologías muy innovadoras y esperanzadoras", expone Amat, tecnologías y soluciones que su compañía está ayudando a desarrollar.
Como ejemplos de estos avances podemos encontrar las terapias avanzadas, investigación y desarrollo, tecnología nueva gracias a materiales novedosos, nuevas formas de fabricar, como mediante la tecnología 3D, dispositivos médicos que combinan varias tecnologías, etc. "La cantidad de nuevas soluciones de salud es brutal. Cada vez se cubren nichos de mercado más pequeños y sectores que antes no tenían la respuesta que necesitaban porque no se invertía en ellos", admite Amat.