
AstraZeneca refuerza su cartera oncológica con un fármaco para el cáncer gástrico. La farmacéutica pagará por el medicamento, en primeras fases de ensayo, hasta 1.100 millones, de los que 63 se realizarán en un pago inicial y el resto estará condicionado a los hitos que vaya consiguiendo la molécula tanto en su desarrollo clínico como en ventas.
La terapia fue inventada por la compañía KYM Biosciences, quien además se ha asegurado royalties de doble dígito por las potenciales ventas del medicamento. AstraZeneca explica que espera que la transacción se cierre en la primera mitad de este año, sujeta a las condiciones habituales de cierre y a las autorizaciones regulatorias. A partir de ahora, todo el desarrollo que le resta al medicamento estará dirigido por la multinacional inglesa.
El futuro medicamento se está evaluando actualmente en un ensayo clínico de fase I para el tratamiento de tumores sólidos positivos en Claudina 18.2, incluido el cáncer gástrico. Los resultados preliminares del ensayo de fase I han mostrado un perfil clínico alentador. "Con este acuerdo cumplimos con nuestro objetivo de posicionarnos y avanzar como compañía comprometida con los tumores gástricos. En AstraZeneca centramos nuestro esfuerzo en encontrar nuevas y exitosas terapias y aportar soluciones innovadoras a los profesionales sanitarios", explica el jefe de Oncología de la multinacional en España, Ramón Mel.
En los últimos meses, la compañía que dirige Pascal Soriot, ha tirado de chequera para reforzar su negocio. Fue a principios de enero cuando invirtió 1.600 millones en comprar CinCor, una compañía con una cartera de productos enfocada en enfermedades cardiorrenales. Poco antes, a principios de diciembre, la farmacéutica británica se hizo con Neogene Therapeutics por 304 millones de euros. Esta empresa investiga, desarrolla y fabrica terapias con receptores de células T de nueva generación, es decir, medicamentos oncológicos.
Por tanto, la estrategia a futuro de AstraZeneca descansa sobre tres pilares fundamentales. El primero de ellos es la oncología, seguido de la salud cardiovascular y renal. Por último se encuentra la rama de enfermedades raras. Para este último segmento, la multinacional británica protagonizó una de las compras más grandes de esta década. La farmacéutica invirtió cerca de 40.000 millones para adquirir Alexion, estructura bajo la cual vehiculiza su negocio de medicamentos huérfanos.