
La actividad física no debe ser una tarea difícil. De hecho, si no tenemos suficiente tiempo, no llegamos a la hora para acudir al gimnasio, sobre todo por temas laborales, o solo de pensar en el entrenamiento ya nos cansamos, la solución viable para todo el mundo es caminar.
Propiedades
Entre sus beneficios, cabe destacar los siguientes, según varias investigaciones:
- Fortalece huesos y músculos. Ayuda a fortalecer los huesos al ejercer presión sobre ellos, lo que estimula la producción de nuevas células óseas y mejora la densidad mineral ósea. Por si fuera poco, tonifica los músculo de las piernas, los glúteos, el abdomen y la espalda.
- Mejora el estado de ánimo y reduce el estrés. Puede liberar endorfinas, que tienen un efecto positivo en el estado de ánimo y la reducción del estrés.
- Reduce el riesgo de enfermedades crónicas. Puede ayudar a prevenir o controlar la diabetes tipo 2, algunos tipos de cáncer y otras enfermedades crónicas.
- Mejora la salud cardiovascular. Hacerlo de forma regular puede reducir el riesgo de enfermedades cardiacas, accidentes cerebrovasculares y presión arterial alta.
- Minimiza el riesgo de caídas. Puede mejorar el equilibrio y la coordinación, lo que puede reducir el riesgo de caídas, en especial en personas mayores.
- Ayuda a controlar el peso. Quema calorías y ayuda a mantener un peso saludable. Incluso a perder peso si se junta con una dieta saludable.
A tener en cuenta
Precisamente para este último aspecto positivo hay muchas personas que se preguntan si debemos seguir un número de pasos por minuto. Y la respuesta es afirmativa, según ha declarado contundentemente Felipe Isidro, catedrático de Ejercicio Físico y Salud y responsable de Actividad Física de PronoKal Group, a la revista Clara.
A su juicio, para que la caminata nos ayude a perder peso, también tiene que combinarse con "un déficit calórico adecuado a través de una pauta nutricional personalizada". Por si fuera poco, debe cumplir los siguientes requisitos:
- Ha de durar entre 30 y 60 minutos cada sesión.
- Debe tener una frecuencia de 4-6 días por semana.
- A paso ligero, con una intensidad de 120-140 pasos por minuto.
- Pueden incluirse subidas o cambios de ritmo para progresar en la mejora de la salud metabólica.
Para obtener resultados de inmediato de cara al periodo veraniego el experto ha aconsejado llevar a cabo caminatas de entre 10.000 y 15.000 pasos diarios a un ritmo de unos 120 pasos por minutos con cambios de intensidad. Lo que implica, claro está, dar dos pasos por segundo.