Las cadenas de restauración organizada esperan alcanzar en 2022 un ritmo de crecimiento en sus ventas similar al que registraron en 2019, último ejercicio sin pandemia.
Este optimismo se sustenta sobre una previsible reactivación del consumo en una hostelería sin restricciones a partir de Semana Santa y, sobre todo, en la que se espera que sea una muy buena temporada estival marcada por la vuelta del turismo internacional.
Estas predicciones corresponden a Carlos Pérez Tenorio, presidente de Marcas de Restauración, la asociación empresarial que aglutina en nuestro país a las principales cadenas de restauración organizada, un sector que lleva meses asumiendo parte del constante aumento de los costes de explotación en hostelería, un sector que según el Instituto Nacional de Estadística (INE) elevó sus tarifas un 2,6 % ante la presión inflacionista.
Además de la vuelta de un turismo internacional espoleado por una bajada en la incidencia del Covid-19, las cadenas de restauración organizada están notando la recuperación de momentos de consumo que habían desaparecido durante la pandemia, como el ocio nocturno, los desayunos o las comidas tras la vuelta de los trabajadores a sus puestos de trabajo.
Esta reactivación del consumo llega en medio de una tormenta inflacionista espoleada por la incertidumbre generada por la reciente invasión rusa de Ucrania, que tendrá un impacto aún por determinar en el aumento de los costes energéticos. Esta situación podría elevar aún más el porcentaje de repercusión de costes sobre el cliente final de entre el 10 y el 15% que avanzaron los hosteleros antes del final de la campaña de Navidad, en lo peor de la nueva ola de la pandemia.
Niveles de 2019
Sin embargo, los operadores de restauración organizada se mantienen en su apuesta por ser asequibles y no repercutir en exceso esta inflación sobre sus clientes, ya que, según Pérez Tenorio, "no queremos ser lo primero que dejen de hacer los consumidores ". Y es que justo antes de la llegada de ómicron, en noviembre de 2021, la práctica totalidad de las empresas asociadas a Marcas de Restauración ya crecían en paralelo a los niveles de 2019.
Mientras, centran sus esfuerzos por despejar las incógnitas que deja la pandemia sobre el consumo en este sector, como el peso del delivery con el final de las restricciones, los cambios en la forma de comer en el entorno laboral, el aumento de las tendencias saludables en alimentación o las tendencias en nuevas tecnologías en la relación con un cliente que no renuncia a seguir disfrutando de la experiencia presencial en sus establecimientos.
Estas nuevas tendencias de consumo conforman el programa de "Restaurant Trends", el congreso para empresarios del sector que organiza Marcas de Restauración la próxima semana en el marco de la Feria HIP en Ifema en Madrid.