
"La reducción de la jornada provocaría un aumento de los costes laborales en el sector hostelero de entre el 6 y el 8% y eso es totalmente inviable. No nos quedará más remedio, si no queremos tener que contratar a más trabajadores, con el problema añadido de la falta de personal, que reducir los horarios de apertura". José Luis Álvarez Almeida, presidente de Hostelería de España, se muestra así de contundente en una entrevista con elEconomista.es.
Al frente de la patronal de los hosteleros desde el pasado mes de marzo, Álvarez Almeida recuerda que "la reducción de la jornada no es algo que se haya planteado en ninguna de las mesa de negociación de los convenios colectivos a nivel regional ni es en ningún caso una reivindicación de los sindicatos, con lo que el Gobierno ha roto el diálogo social". Para el presidente de Hostelería de España el problema va además mucho más allá, porque "lo que se está haciendo desde el Ejecutivo en el fondo es modificar el modelo turístico español, poniendo palos en la rueda de un sector que es absolutamente clave para la economía, además de forzarnos a tener que reducir las horas de apertura de los bares y restaurantes".
Ante esta situación, en el sector de la hostelería hay una preocupación especial por el goteo continuo de cierres ante la pérdida de rentabilidad que sufren los establecimientos más pequeños, como los bares de los pueblos. "Es verdad que hay un récord de turistas, pero de forma paralela se está produciendo una ralentización de la demanda interna y el crecimiento de la hostelería se está frenando", apunta Álvarez Almeida.

Según las últimas cifras publicadas, el crecimiento de la hostelería durante los cinco primeros meses del ejercicio fue del 4,2%, lo que supone la mitad prácticamente respecto a la subida del 8% que se registró en el mismo periodo de 2024. "En alojamiento el aumento de las ventas es algo mayor, del 6,4%, pero en restauración es de solo un 3,2%", señala el presidente de la patronal.
Compuesto por una red más de 300.000 establecimientos, entre bares, restaurantes, cafeterías, colectividades, locales de ocio nocturno y alojamientos, el sector de la hostelería, que goza de un modelo único en toda la Unión Europea, suma ya 1,9 millones de trabajadores y se ha consolidado como uno de los principales motores de desarrollo económico y social de España.
De acuerdo con el último informe anual que elabora Hostelería de España, la situación, sin embargo, no es nada fácil. Tan solo en la última década han echado el cierre más de 31.000 bares y, aunque es cierto, que el número de restaurantes ha crecido en ese mismo periodo, hay que tener en cuenta también que lleva unos años igualmente estancado.
Dificultades
Álvarez Almeida resalta, asimismo, que se está produciendo una reducción en el número de plazas hoteleras ante el incremento imparable de las viviendas de uso turístico, "lo que repercute directamente sobre los precios y nos perjudica en las zonas turísticas tensionadas a la hora de encontrar trabajadores por las grandes dificultades que tienen para encontrar un alejamiento". El temor es que la reducción de la jornada agrave el problema después de que, de acuerdo con sus estimaciones, "los costes laborales se incrementaron ya el año pasado entre un 12% y un 14% -suponen ya aproximadamente un tercio de los costes totales-, una subida que se sitúa muy por encima del incremento de los precios, con un alza de entre el 6 y el 8%. Y es que los hosteleros no han podido en ningún caso toda la subida de los costes que están teniendo, tanto en el terreno laboral como en lo correspondiente a la compra de mercancía.
"Es cierto que la hostelería está creciendo, pero tiene un problema de rentabilidad, la gran dificultad con la que nos encontramos en este momento", explica el máximo responsable de Hostelería de España. Y en este sentido, recuerda, que se está produciendo un incremento en las solicitudes de aplazamiento en el pago de impuestos. "Hay comunidades autónomas donde incluso se ha triplicado, hasta el 30%", dice.
Empleo al alza
Pese a todo, el sector de la hostelería alcanzará este verano un hito histórico en España en términos de empleo. Gracias al fuerte impulso del turismo, bares, restaurantes y cafeterías superarán por primera vez la barrera de los dos millones de trabajadores. Es una cifra que estuvo a punto de alcanzarse ya en verano el año pasado, pero que finalmente no se pudo sobrepasar después de que la temporada estival fuera algo más floja de lo previsto. Sin embargo, ahora la situación es distinta. De acuerdo con los datos de afiliación a la Seguridad Social, el pasado mayo se alcanzaron ya 1,96 millones de trabajadores en el sector, con lo que, según explica José Luis Álvarez Almeida, presidente de la patronal Hostelería de España, "todo parece indicar que ahora sí que se superará esa barrera".
Las previsiones de la organización apuntan a que este récord en el nivel de empleo irá acompañado, lógicamente, de otro de facturación. Álvarez Almeida insiste, no obstante, en lanzar un mensaje de prudencia "ante el problema de la rentabilidad".En el terreno laboral, una de las grandes dificultades con las que se está encontrando el sector está en el absentismo, que golpea a toda la economía española. El presidente de la organización de los hosteleros advierte, en cualquier caso, de que "no se trata tanto de que la gente falte a su trabajo como de que hay un colapso en el sistema sanitario que está afectando a la gestión de las bajas laborales".