El Ministerio de Agricultura informa de salidas de aceite de 140.000 toneladas en el mes de mayo, dato que incluye una estimación de 20.000 toneladas que habrá que confirmar con Aduanas. Las salidas acumuladas en este octavo mes de campaña son de 1.001.480 toneladas. Las existencias totales a final del mes de mayo son de 763.310 toneladas, lo que supone 119.083 menos que en el mes de abril. El nivel de salidas medio de los cinco meses del año 2025 es de 136.300 toneladas. Un ritmo que el sector considera bueno, aunque se expliqueen parte por un duro ajuste de cotizaciones, con precios medios en origen desde diciembre entre tres y cuatro euros.
Del total de exigencias, en almazaras hay 555.573,75 toneladas, en envasadoras 200.609,5y en el Patrimonio Comunal Olivarero 7.128.17.
Si se mantiene el buen comportamiento de mercado con este nivel medio de salidas (120.000 + importaciones) el stock final de campaña estaría por debajo de las 285.000 toneladas. Una cantidad mínima pero suficiente para garantizar la estabilidad del mercado.
El precio
El Poolred informaba hoy de precios medios en los aceites de oliva de 3,2 euros por kilo.
Del 2 al 8 de junio, el precio en origen del aceite de oliva virgen extra fue de 3,423 euros/tonelada, el virgen de 2,947 y el lampante de 2,759. En el caso del picual de Jaén, el aceite de oliva virgen extra se sitúa en los 3,323 euros/tonelada, el virgen en 2,939 y el lampante en 2,798, según datos de Asaja-Jaén.
La campaña comenzó con tensión por la escasez de producto y precios de entorno a 7 euros en octubre. En diciembre había caído ya por debajo de los 4 euros el kilo, y desde entonces se ha mantenido entre 3 y 4 euros.
Sospechas
Los productores han insistido en que no hay motivos objetivos para una caída más allá de la horquilla entre los 5 y los 4 euros el kilo, toda vez que al ritmo de comercialización actual las existencias van a llegar justas para abastecer el mercado.
En mayo GOAG presentó una denuncia formal en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) "por una posible alteración artificial de los precios en origen del aceite de oliva". La organización detectó un desfase de dos euros por kilo.
El cálculo se apoyaba en un estudio de investigadores de la Universidad de Jaén, la Universidad de Córdoba y el IFAPA, con una metodología basada en la aplicación de un software avanzado de detección de desequilibrios de mercado. El análisis ha permitido identificar "márgenes injustificables entre el precio real pagado a los productores y el valor de mercado estimado, apuntando a un posible desequilibrio provocado intencionadamente".