Retail - Consumo

Julio Bruno (Grupo Lío): "Ante la alta demanda, barajamos abrir de forma permanente en Las Vegas"

  • "Después de 15 años somos un cabaret moderno, con cena y que se convierte en un night club con DJ's"
  • "La llegada de Andreu Genestra nos aportó un plus de formación para los equipos y la consolidación de nuestra oferta"
  • "No hemos sufrido falta de demanda porque invertimos mucho en locales, personal, ingredientes y calidad"
Julio Bruno en uno de los escenarios de Grupo Lío.

Este verano se cumplen 15 años del nacimiento, dentro de la estructura de Grupo Pachá, de una propuesta hostelera singular que mezcla entretenimiento de calidad con alta gastronomía. Tres lustros después, el ya independiente Grupo Lío cuenta con ubicaciones en Ibiza, Mallorca, Londres y Miconos y aspira a seguir viajando.

¿Cómo surge un modelo de negocio que fusiona mundos que antes no se mezclaban?

El grupo nace como parte del grupo Pachá, de la mano de Ricardo Urgell y Joan Gracia, del TriCiCle, que se convirtió en el director artístico. Ricardo quería hacer algo especial en un espacio de La Marina de Ibiza donde había un proyecto que no funcionaba. Al principio la idea era un restaurante muy exclusivo donde, de repente, pasaban cosas. De 12 números, no conectados, hoy llegamos a entre 30 o 32 con un hilo conductor. No es una obra de teatro ni un musical, pero tiene una conexión. Sigue siendo un restaurante que cuenta desde hace más de un año con un director culinario como Andreu Genestra, un estrella Michelin mallorquín, con una comida excepcional donde ves un show con un nivel de producción en muchos casos por encima o a la par de lo que puedes ver en Broadway. Es una producción muy cara, exclusiva, con vestuario increíble y artistas que van desde campeones del America's Got Talent, a malabaristas de cuerdas, finalistas de La Voz o Nia, la ganadora de la 11ª edición de Operación Triunfo, que salió de Lío. Hoy somos un cabaret moderno, con cena y que después se convierte en un night club con diferentes DJ's cada noche.

¿Trabajan como una función con diferentes pases?

A las 20.30 hay un pre show mientras el cliente pide la cena y la bebida y entre las 21.30 y las 24.00, en función del local, se van sucediendo una serie de números durante una cena en la que pueden levantarse y bailar. Siempre hay una parte interactiva de unos 20 segundos. La noche se va convirtiendo en un verdadero lío en el que se suceden números de baile, circo o flamenco, por ejemplo. Tanto la comida como el espectáculo tienen una duración concreta que el público se puede alargar después en el club o en los reservados VIP.

Salvo Londres, el resto de sus ubicaciones están muy asociadas al turismo veraniego, ¿cómo organizan sus temporadas?

Aunque los clubes abren durante más tiempo, la cena con espectáculo funciona por temporadas desde mediados del mes de mayo. En el caso de Mallorca se mantiene hasta final de año, mientras que en Mikonos, la temporada se comprime más entre junio y septiembre. Los espectáculos se montan con un hilo conductor con particularidades en función del mercado. En cada en cada ubicación hay un show diferente que va rotando con Ibiza como punto de partida. Contamos con tres castings diferentes para cada localización, con lo que la plantilla en temporada de media en Ibiza puede estar en 280 personas y en otras 200 en Mallorca y Mikonos. En Ibiza damos de cenar a unos 550 comensales todas las noches y, posteriormente, en la discoteca se atiende a otras 1.000 personas. Para que todo funcione necesitamos camareros, cocineros, seguridad, personal de mantenimiento, maquilladores, electricistas, técnicos de sonido e iluminación, artistas…

Además de una importante inversión media por local, ¿no es así?

Una inversión millonaria, sí. Llevo muchos años en el sector del turismo y nadie invierte lo que nosotros. Esto no es cosa de contratar a cuatro bailarines y ponerles plumas. Tenemos desde coreógrafos a diseñadores de vestuario. Ese nivel de inversión también nos hace muy especiales, porque además damos beneficios. El grupo es propiedad de Trilantic Capital Partners, antiguo dueño de Pachá. Aunque no compartimos resultados, te puedo decir que tuvimos un buen 2024 después de otro año muy bueno.

¿A pesar de que el precio medio de su propuesta sea más elevada?

En nuestros locales, como mínimo, se pagan entre 270 y 300 por persona, un precio medio asequible para un escenario como Ibiza, por ejemplo, donde en cualquier restaurante ubicado en la playa la gente se gasta eso, pero sin el añadido de asistir a un show con más de 30 artistas y todo el trabajo que hay detrás, ni el menú de un estrella Michelin. En los últimos años no hemos sufrido falta de demanda. En Miconos, por ejemplo, hemos crecido a un ritmo del 20% cada año en los cuatro que llevamos allí. No hemos sufrido porque hay un trabajo muy fuerte detrás y seguimos invirtiendo mucho en los locales, el personal, los ingredientes, la calidad y, claro, eso se paga. La gente lo que sí hace ahora es discernir mucho más dónde ir y en Lío parece que hemos acertado con una fórmula mágica.

La llegada de Andreu Genestra, chef con 1 estrella Michelin, ha elevado el nivel gastronómico del grupo.

¿Qué ha supuesto para el grupo la incorporación como asesor de chef con estrella Michelin como Andreu Genestra?

Con Andreu esta temporada que acaba de arrancar hemos unificado un porcentaje importante de los platos, de manera que cuando un cliente visita varios de nuestros locales para ver los diferentes shows, notan que el restaurante tiene un mismo estilo reconocible a través de la comida. Pero, por supuesto, hemos aprovechado para elevar el nivel de la comida. Por ejemplo, en Mikonos somos el único local de la isla que sirve wagyu japonés, la exclusiva ternera de Kobe. Cuidamos al máximo el producto que servimos, desde una langosta y el arroz, al jamón ibérico o el caviar. Andreu nos ha aportado al grupo ese nivel plus de formación para los equipos, además de una consolidación de la oferta del grupo en torno a la más alta calidad y el lujo, con propuestas como el lingote de oro, un pastel de chocolate bañado oro de 24 kilates.

¿Qué perfil de cliente se puede permitir comer oro de 24 kilates?

Hay de todo, mucha gente del cine o deportistas, viene mucha cliente con yates, por supuesto, ya que estamos en La Marina de Ibiza, pero también mucho público local, español, porque damos la posibilidad a esos amantes del arte que no quieren cenar para que asistan a los espectáculos con entradas más económicas desde una barra que siempre está llena. Hay una mezcla de perfiles.

¿Cómo casa esta propuesta en un destino más urbano como Londres?

En Londres el grupo había hecho un pop up en el que detectamos una gran demanda en una capital que tiene una fuerte tradición teatral y musical. Es cierto que nuestro modelo parece tener mejor encaje en ubicaciones como Ibiza, donde la gente acude con una actitud más festiva y hedonista.

"Nuestro modelo tiene un mejor encaje en ubicaciones donde la gente acude con una actitud más festiva y hedonista"

¿Se plantean la posibilidad de abrir nuevas localizaciones a nivel internacional?

Llevamos tres años ofreciendo nuestro espectáculo a través de esta fórmula del pop up en el hotel casino Bellagio en Las Vegas, el que sale en la película Ocean's Eleven, donde cubrimos durante un mes la temporada de Navidad que se prolonga hasta mediados de enero. Ahora estamos barajando la posibilidad de abrir permanentemente en la ciudad porque existe una demanda estable para nuestra propuesta. Aunque es cierto que hemos visitado con nuestros pop ups muchos destinos internacionales, desde Puerto Cervo en Cerdeña (Italia), a Dubái o San Petersburgo (Rusia), para abrir algo permanente tienes que elegir una ubicación donde tengamos la clientela suficiente como para llenar los locales todas las noches. Nos llaman de muchos sitios, pero hoy por hoy estamos muy contentos con el grupo MGM, dueño del Bellagio, que es el operador más importante allí. Las Vegas es un sitio donde siempre están buscando innovación y nuestra fórmula requiere que los equipos estén trabajando constantemente.

¿Qué aporta un grupo español a la industria del entretenimiento en un destino como Las Vegas?

No tienen algo similar a nuestra oferta, a pesar de ser expertos en entretenimiento con residencias permanentes de gigantes como el Circo del Sol, Céline Dion o Lady Gaga. Nosotros aportamos la esencia mediterránea, el arte español y esa gastronomía tan particular de nuestras islas. No hay que olvidar que nuestro show además incorpora comida y no las típicas palomitas de cualquier otro espectáculo, además de permitirte al cliente interactuar y participar de la fiesta poniéndose de pie y bailando. Somos un restaurante de lujo que tiene un espectáculo de súper lujo.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky