
El Ayuntamiento de Pontevedra, el que más locales de este tipo cuenta en su haber, ha aprobado, este jueves en la Xunta de Goberno Local, la actualización de la normativa para 'furanchos' y 'loureiros' con una ampliación sus opciones en el menú. Se trata de una modificación que cambiará la cuantía mínima de la póliza de seguros de responsabilidad civil de estos establecimientos.
Junto con esta actualización, también se aprueban la adaptación a la normativa autonómica lo que permitirá ofrecer una mayor variedad de tapas. Así, los distintos 'furanchos' podrán desde su apertura contar con cinco platos distintos.
Si antes ya podían ofrecer tablas de quesos, pimientos de padrón, oreja-chorizo, zorza-lomo y tortilla de patatas; ahora sumarán: costilla, huevos fritos, sardinas y jurelitos a la brasa, callos con garbanzos o habas, empanada o empanadilla y croquetas.
La teniente de alcalde, Eva Vilaverde, ha informado en la página web del Ayuntamiento de Pontevedra que ya ofrece un nuevo apartado con la información pertinente a todos los locales autorizados, indicando su período de apertura, dirección y geolocalización.
Aunque no hay un censo oficial de furanchos, se estima que en la comunidad gallega hay unos 350 oficiales y una cantidad indeterminada que operan sin estar registrados. Estos locales forman parte del patrimonio gastronómico en Galicia y su apertura se da cuando llega el tiempo más primaveral y veraniego, de abril a octubre.
Mapa
Se concentran en dos zonas determinadas: la principal en las Rías Baixas y luego en menor medida, en la zona de Betanzos (A Coruña). La comarcas del Salnés (Sanxenxo, Cambados, O Grove, Ribadumia) y O Morrazo (Cangas, Moaña, Bueu, Aldán) son el epicentro de la actividad de los furanchos. A mayores, también podemos destacar la zona de Bembibre, a las afueras de Vigo.