
La organización de consumidores Facua ha denunciado a Cirque du Soleil por publicidad engañosa al inflar los precios de sus entradas y también prohibir la entrada de comida a los espectadores de sus espectáculos.
En un comunicado en su página web, Facua ha informado de que ha presentado una denuncia ante la Dirección General de Consumo Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 por ocultar el 10% del IVA en sus precios de venta, lo que en la práctica supone una publicidad engañosa y aumento del precio final.
"La empresa no incluye el 10% de IVA en el precio de las entradas que aparecen en su web. Ni siquiera aclara que hay que sumarles el impuesto hasta finalizar el proceso de compra", reza el comunicado de la organización.
El funcionamiento de esta dinámica es el siguiente, de acuerdo con la información facilitada por Facua: "En el apartado de compra de entradas aparecen unos precios que no son los que finalmente se les cobra al usuario, ya que no tienen incluido el IVA" y después ese dinero "se añade de manera automática al precio inicial indicado durante la selección de asientos, incrementándose un 10% en el Resumen de pedidos".
En paralelo, Facua ha denunciado también que Cirque du Soleil prohíbe a los espectadores la entrada de comida y bebida en los espectáculos y que en algunos momentos incluso registra las pertenencias de dichos espectadores en la entrada a los recintos.
La organización denuncia que la intención de Cirque du Soleil es que "los usuarios se vean forzados a abonar los elevados importes de dentro del recinto" y destaca el precio de la botella de agua de 330 mililitros, de cuatro euros.
Dos infracciones contra los consumidores
En su escrito, Facua asegura que Cirque du Soleil infringe el artículo 60.2 del Real Decreto Legislativo 1/2007, de 16 de noviembre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios (puede leerlo en este enlace), ya que debe figurar el "precio total, incluidos todos los impuestos y tasas".
También acusa a la empresa de infringir el artículo 82 del mismo texto, al entender que la prohibición de entrar con comida y bebida a un espectáculo no considerado como de hostelería es una cláusula abusiva.