
Clint Eastwood lleva más de 40 años prohibiendo los productos Coca-Cola en sus películas. El veto a la conocida marca fue la venganza que el actor, director, guionista y productor planeó en respuesta a la película 'Karate Kid', distribuida por Colombia Pictures, propiedad de Coca-Cola en ese momento.
El 1984 fue un año de grandes estrenos para Hollywood, con películas de éxito como 'Indiana Jones y el Templo Maldito', 'Terminator' o 'Cazafantasmas'. Otra cinta que también tuvo una gran acogida por parte del público fue 'Karate Kid', film que pudo haber protagonizado Kyle Eastwood, hijo mayor de uno de los grandes mitos de la gran pantalla, y dar vida así al famoso 'Daniel'. Sin embargo, el equipo de casting lo rechazó tras fracasar en una audición, según informa 'The Game of Nerds'.
Finalmente, la película estadounidense dirigida por John G. Avildsen, escogió actor protagonista: Ralph Macchio. Esta decisión enfadó tanto a Clint Eastwood que desde entonces lleva sin beber una Coca-Cola en señal de protesta hacia la marca. Además, este veto también lo trasladó a sus películas y sus sets de rodajes donde no se observaba la presencia de esta mítica bebida.
Con todo esto, la última vez que se exhibieron botellas de Coca-Cola en películas de Clint Eastwood fue en 1980, en 'Bronco Billy' (1980), precisamente en donde su hijo, Kyle Eastwood, tuvo un papel (al igual que en otras películas como por ejemplo en 'Los Puentes de Madison' o en 'J. Edgar').
Este rencor de Clint Eastwood hacia Coca-Cola se ha mantenido a lo largo de todo este tiempo, 39 años, a pesar de que unos años después (1989) Coca-Cola vendió Columbia Pictures a Sony. Desde 1984 no ha vuelto a salir ninguna botella en sus películas, aunque sí que se ha observado algún tipo de publicidad de la prestigiosa marca en películas como 'Mystic River' (2003) o 'Gran Torino' (2008). Por ejemplo, en la primera sale el nombre de Coca-Cola en una máquina de vending y en la segunda lo hace en una lata de Coca-Cola Diet, como bien se aprecia en la imagen.
Una trayectoria distinta
Mientras Clint Eastwood seguía forjando su leyenda como actor y director, su hijo quedó relegado a un segundo plano tras ser rechazado en 'Karate Kid'. El hecho de haber protagonizado esta película podría haber relanzado su carrera profesional, sin embargo, Kyle Eastwood separó el camino del de su padre y optó por el mundo de la música.
En este sector, el hijo mayor de Clint Eastwood ha dejado huella como bajista de jazz y ha contribuido a la creación de bandas sonoras en películas tan conocidas como 'Cartas desde Iw Jima', 'Invictus' o 'Gran Torino'.