François Lurton, presidente y dueño del grupo bodeguero del mismo nombre, uno de los más importantes en la región de Burdeos, está decidido a impulsar la cultura del vino y luchar contra el cambio climático, el mayor reto al que se enfrenta el sector, con una viticultura ecológica.
Con varios chateaux familiares en el sudeoeste de Francia, en los que participa junto al resto de la familia, ha impulsado de forma paralela su propia empresa y cuenta ya con bodegas no solo en el país vecino, sino también en Argentina, Chile y España, donde tiene presencia en las denominaciones de origen de Toro y Rueda. En total, suma ya más de cien vinos diferentes en todo el mundo.
¿Cuándo empezó su familia a elaborar vino?
Mi bisabuelo tenía una destilaría, pero en 1892 Château Bonnet, en Entre-deux-Mers, en el departamento de la Gironda, y a partir de ahí empezó a elaborar vino. Cuando un hijo murió en la primera guerra mundial, decidió comprar varias chateaux en la región de Margeux. Hoy es la cuarta generación la que está al frente de las bodegas. Mi hermano Jacques y yo empezamos a trabajar en el vino con mi padre en los años ochenta, desarrollando mucho el negocio. Al mismo tiempo creamos una empresa de asesoramiento. Nuestros clientes nos encargaban hacer vino para ellos en distintos lugares y es así cuando empezamos a conocer Toro y Rueda en España; además de Argentina, Chile o Australia.
"Intento exportar vino español a precios altos, pero luego hay bodegas que compiten a mitad de lo que vendo yo"
¿Y cómo empezaron a trabajar de forma independiente?
Fue en la década de los noventa. Mi hermano y yo empezamos a comprar bodegas en Australia, Argentina, Chile, Toro y Rueda. En 2007 yo compré la participación a mi hermano, que se quedó con el negocio australiano. En Argentina fuimos pioneros en el Valle de Uco; en Chile entramos en Valle de Colchagua y en España, como digo, en Rueda y Toro.
¿Y por qué Rueda y Toro?
A pesar de su importante pasado, la D.O. Toro no gozaba de la reputación que merece. Era una denominación que permanecía a la sombra de su prestigiosa vecina, la Ribera del Duero, pero que tiene un gran potencial. En Rueda, que es mucho más conocida y donde hay bodegas que están produciendo grandes volumenes, nuestra historia comenzó en 1992 con el descubrimiento de su uva autóctona y única, el verdejo, que tiene además una gran capacidad de adaptación a la sequía y al cambio climático. Producimos vinos con marcas como Hermanos Luton o Campo Elíseo.
"Rueda va a salir fortalecida del cambio climático porque la uva de verdejo es muy resistente a la sequía"
¿Le gustaría entrar en otras denominaciones?
Quiero seguir invirtiendo y tengo mucho interés por los vinos españoles. Me gustan mucho, por ejemplo, los vinos del Bierzo (León) y la uva mencía. Me gustaría hacer algo en este sentido con mencía, pero también es verdad que ahora mismo hago cien vinos diferentes en todo el mundo y hay mucho trabajo todavía por hacer para consolidarlo. Cada vino tiene su carácter, su particularidades y necesitas tiempo para desarrollarlo.
¿Están exportando desde España?
Estoy exportando desde todos los países en los que estamos presentes. En el caso de España, solo vendemos en el mercado nacional el 25%, el resto lo exportamos. Y en Francia la situación es similar. En el mercado francés solo se vende el 10% de lo que producimos. Vendemos mucho en Estados Unidos, Canadá, México, Alemania, los países escandinavos...y hasta ahora también en China, aunque en este caso está bajando. En el mercado chino están creciendo mucho los vinos de Suramérica, que tienen menos costes, al margen de que su producción también está aumentando.
"Exportamos el 75% de lo que producimos en España, en las denominaciones de Toro y Rueda"
España vende fuera mucho vino, pero los precios siguen siendo bajos...¿qué se podría hacer?
Es verdad que es un problema para los vinos españoles, aunque hay también cada vez vinos de gran prestigio y calidad que están vendiendo más caro. Yo trato de vender a precios altos. En Rueda, empece a vender por ejemplo en la década de los años noventa a precios altos, pero luego vinieron muchas bodegas que se lanzaron a producir grandes volúmenes y competir con nosotros fuera de España a mitad de precio. Se ha llegado a vender vino por debajo de los costes. El problema que hay fuera es que muchas veces los clientes cuando piensan en el vino español están pensando en vino barato. Eso es algo que hay que cambiar. Ahora mismo se están haciendo vinos de gran calidad en muchas partes., como Argentina o Australia. La posición que tenía antes el vino francés ha desaparecido.
¿Se debería impulsar más la cultura del vino en países como Francia o España?
Desde luego. En Francia no se cuida de hecho como se debería el vino. A mi gustaría que se impulsara su consumo. No entiendo porque hay sitios por ejemplo que venden cerveza y no venden vino. A mi gustaría que se vendiera vino hasta en los McDonald's.
¿Les está afectando el cambio climático?
Desde luego, está afectando mucho en todoel mundo, y especialmente en España, que está sufriendo una gran sequía. Afortunadamente, nuestros viñedos están en altitud y tenemos noches más frías. Pero el calentamiento global está teniendo ya consecuencias. En Toro, por ejemplo, antes recogíamos la uva a principios de octubre y ahora lo hacemos ya a principios de septiembre, al mismo tiempo que los blancos. Se ha adelantado un mes. Al mismo tiempo, los consumidores piden menos alcohol en el vino y es complicado porque con el calentamiento sube la graduación.
¿Y qué están haciendo para combatirlo?
Buscamos terruños en zonas más frescos y apostando por los cultivos ecológicos y variedades de uva más resistentes. Pero las consecuencias del cambio climático, como decía antes, son ya evidentes. Se están adelantando las vendimias y reduciendo las producciones en todo el mundo.