Capsa Food, la dueña de marcas como Central Lechera Asturiana, ha presentado las cuentas del ejercicio 2022. La compañía ha logrado incrementar su facturación un 18%, hasta situarse en 895 millones de euros debido a la inflación.
Además, la empresa ha cerrado el 2022 con un resultado neto de 5,14 millones, un 73% menos que en 2021. Desde Capsa Food asegura que esto se debe al encarecimiento de la leche en origen y al incremento de los costes de producción. Así, y según los datos del índice de precios en origen y destino de los alimentos (Ipod) de diciembre de 2022, la leche de vaca tenía un precio en origen de 0,50 euros mientras que a principios de 2022 estaba en 0,35 euros.
En definitiva, en 2021, Capsa Food ha tenido que hacer frente a un impacto de costes superior a los 175 millones de euros, de los cuales 100 millones se debían a la subida del precio de la leche en origen, 30 millones por los costes energéticos y 45 millones por otros costes.
En lo que respecta a litros de leche recogida, el año pasado desciendo un 4% y el total ascendía a 839,5 millones. Una de las explicaciones antes este fenómeno es la tendencia de los ganaderos a reducir el número de cabezas de sus ganados ya que no podían hacer frente a los costes y el negocio no era rentable.
Mercados
A pesar de todas las dificultades por las que está pasando el sector, Capsa Food sigue siendo líder en el mercado lácteo español. Así, la leche líquida tiene una cuota de valor de un 18,4%; en nata, un 20,2% y en la familia de la mantequilla un 25,5%.
Además, en la hostelería la compañía mantiene su liderazgo y también la rentabilidad, cerrando 2022, con una cuota de mercado del 40%.