El empresario multimillonario austriaco y de origen croata, Dietrich Mateschitz, fundador y propietario de la empresa de bebidas energéticas Red Bull y de varios clubes del fútbol y escuderías de Fórmula 1, entre otros, falleció este sábado a los 78 años de edad. Así lo informó la compañía al hacer público un mensaje enviado por mail a sus trabajadores, en un comunicado donde avisa a la prensa que de momento no se responderán preguntas.
Red Bull patrocina o es propietario de numerosos equipos deportivos, como las escuderías de Fórmula 1 Red Bull y Alpha Tauri, y varios clubes de fútbol, entre ellos el austriaco Red Bull de Salzburgo y el RB Leipzig de la Bundesliga alemana, así como otros clubes en Estados Unidos (New York Red Bull), Brasil o Ghana. Además, la empresa patrocina a numerosos atletas y es un nombre de referencia en eventos de deportes extremos, como moto y bicicross o vuelo acrobático.
Para llegar al éxito, Mateschitz tuvo un largo camino que recorrer que empezó en 1982. Por aquel entonces se ganaba la vida como director de marketing de una compañía de pasta de dientes alemana, Blendax, pero ese año, durante un viaje de negocios a Asia vio un filón en el mercado de las bebidas energéticas, una vía comercial no explorada hasta entonces. En ese momento, Mateschitz se reunió con el tailandés Chaleo Yoovidhya, creador de la marca Krating Daeng, una bebida ideada para el consumo de los trabajadores rurales tailandeses y que después fue extendiéndose a camioneros y transportistas.
En 1984 Mateschitz fundó Red Bull GmbH, junto con Yoovidhya y otros empresarios tailandeses, tras modificar una receta de una bebida energética de este país en forma de un producto que introdujo en el mercado en 1987. Instantes después, este multimillonario en ciernes vio en el motor el escaparate perfecto para su marca, y en 1989 recurrió al piloto austriaco Gerhard Berger para promocionar su bebida y, ya en 1995, convirtió a Red Bull en el patrocinador principal del equipo Sauber. Más tarde, en 2004, Mateschitz compró a Ford el equipo Jaguar Racing de Fórmula 1 y, desde esa base, creó Red Bull Racing, un equipo que hoy en día acumula cuatro títulos de constructores y seis de pilotos.
Mateschitz poseía el 49% de las acciones de Red Bull. En el día de su muerte, su patrimonio llegaba a los 20.500 millones de euros, según la revista especializada Forbes, estableciéndose en el puesto 71 de las grandes fortunas. El año pasado, el grupo logró una facturación de 7.800 millones de euros y vendió 9.800 millones de latas en todo el mundo, un pilar de la expansión del resto del conglomerado, que se ha extendido por varios ámbitos, entre ellos el deportivo.
Sin duda, Mateschitz pasará a la historia de Austria gracias a Red Bull, una marca con una reputación mundial, al igual que otras del país como grupo el Swarovski de cristales, el fabricante de motos KTM, el productor de golosinas Manner y la compañía de lencería Palmers.