
China ha incrementado sensiblemente sus tenencias de deuda del Tesoro de EEUU, una señal que deja entrever que la segunda mayor economía del mundo ha logrado pasar probablemente una de las situaciones más complejas de las últimas décadas. Desde Bloomberg aseguran que para superar este bache han sido vitales unos controles de capital más estrictos que han ayudado a frenar la fuga de capitales. Por otro lado, la pérdida de fuerza del dólar en los últimos meses también ha sido clave para calmar a los mercados emergentes, que parecen respirar aliviados, por ahora.
La nación asiática aumentó su cartera de bonos, pagarés y letras del Gobierno de Estados Unidos en 27.900 millones de dólares hasta los 1,09 billones en marzo, el mayor incremento desde marzo de 2015, según el informe mensual del Departamento del Tesoro estadounidense publicado este lunes. Esto significa que China sigue siendo el segundo mayor acreedor extranjero de deuda estadounidense.
Sumando el incremento en bonos de 3.700 millones en propiedad de Bélgica, que a menudo se considera como una especie de refugio donde China intenta esconder sus movimientos con divisas, el aumento total ha sido el mayor desde 2014. Sin embargo, dada la complejidad para conocer la autoría real de estos flujos de capitales, no se puede dar por sentado al 100% que el incremento de tenencias de bonos de EEUU en Bélgica corresponda a movimientos realizados por agentes chinos.
La economía de China parece haber alcanzado cierta estabilidad después del susto inicial que comenzó hace poco menos de dos años con un crash bursátil que parecía una clara señal de que algo iba mal en la economía del gigante asiático.
El dólar y las restricciones de capitales
No obstante, parece que los mercados se están acostumbrando a la nueva normalidad china, por un lado, mientras que por otros, las restricciones de capitales han ayudado a frenar la caída de las mayores reservas de divisas del mundo, donde se mantienen los bonos del Tesoro, destacan desde Bloomberg.
Las reservas del país aumentaron por tercer mes hasta los 3,03 billones de dólares en abril, después de caer por debajo de la línea psicológica de los 3 billones en enero. Las reservas aún siguen siendo muy inferiores al récord de de 4 billones alcanzado en 2014. Mientras tanto, el yuan se ha debilitado un 0,6% en los últimos tres meses y se negocia a 6,8928 por dólar este martes.
Las reservas de divisas cayeron en China por la intervención del banco central del país, que ha estado usando su munición como si fuera un paracaídas para el yuan. Ahora que la divisa china se encuentra en una banda de fluctuación más cómoda y que el dólar ha perdido parte de la fuerza que mostró tras la victoria de Trump, la calma ha vuelto al Banco Popular de China y a los mercados financieros internos.
"Mucha de la demanda extranjera de bonos de EEUU depende de la demanda de China: el hecho de que sean un acreedor tan concentrado significa que sus compras o ventas tendrán un impacto en el mercado", asegura Aaron Kohli, estratega de renta fija de BMO Capital Markets. "Analizar las ventas de China ha sido la obsesión del mercado durante los dos últimos años. La cuestión es si las reservas de China se van a estabilizar o van a retomar las caídas".
Japón, el mayor tenedor no estadounidense de deuda pública. Según el último informe del Tesoro aumentó sus tenencias hasta un total de 1,12 billones de dólares, un incremento de 3.400 millones con respecto al mes anterior, una aumento de tenencias muy moderado.
El total de los bonos del Tesoro de Estados Unidos en propiedad extranjera ascienden a unos 6,08 billones de dólares en marzo, el nivel más alto desde septiembre. Las compras netas de bonos y pagarés del Tesoro de Estados Unidos por extranjeros fueron de 24.400 millones de dólares, según muestran los datos del Tesoro de EEUU.