Se necesitan, ahora más que nunca, instituciones que miren al mundo con espíritu crítico, capaces de generar impacto social y transformar su entorno de manera positiva. Esade se ha posicionado como la primera escuela de negocios de España para estudiar tanto grados como programas de formación para directivos gracias a la experiencia educativa innovadora que ofrece a sus alumnos.
¿Qué significa para Esade posicionarse como la universidad más innovadora del mercado hispanohablante?
Para nosotros es una gran satisfacción. Por un lado, porque llevamos años centrados en ayudar a los profesionales a reducir la brecha digital; por otro, porque implica una responsabilidad institucional hacia los profesionales hispanohablantes. Nuestro compromiso con la educación de calidad nos exige actualizarnos constantemente, y el camino hacia la excelencia hoy día no lo entendemos sin la innovación. Una innovación que no solo apunta a procesos y metodología, sino que engloba a toda la organización. Todos asumimos esta cultura como un valor característico y diferencial, y no solo en el mercado hispanohablante: afortunadamente, Esade es una institución reconocida por su innovación también en Europa, Asia y América del Norte, pero Hispanoamérica ha tenido siempre un lugar central en la Escuela.
Esade cuenta con el portfolio de Executive Education y "lifelong learning" más extenso e innovador que existe en España y Latinoamérica. ¿Qué tiene de diferencial vuestra propuesta académica?
Hemos creado una oferta de másteres ejecutivos y programas que forman en los últimos avances tecnológicos y en las competencias que demandan y que van a necesitar las compañías. Hemos repensado la presencialidad de nuestra enseñanza y la experiencia de los programas en formato online y blended que llevamos impartiendo estos dos últimos años nos muestra que el aprendizaje es mucho mayor en estos nuevos formatos. La educación online, además, se adapta a las necesidades educativas del alumno y permite unir a personas de todo el planeta en una misma pantalla sin salir de casa. Por encima de todo, lo que hemos diseñado es un modelo pedagógico propio en el que confluyen comunidades de aprendizaje, seguimiento personalizado, interacciones con los profesores, gamificación, dinámicas síncronas y asíncronas de aprendizaje, y todo ello con un alto nivel de calidad, tanto tecnológico como pedagógico y docente.
¿Qué significa para Esade la innovación educativa?
La innovación educativa va impresa en nuestro ADN, es nuestro valor añadido y lo que nos diferencia del resto de universidades. Innovación hoy significa especialización, flexibilidad, digitalización, hiperconectividad, globalidad… y en Esade se traduce en la incorporación sistemática y planificada de prácticas transformadoras, orientadas a mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje. Nuestros programas no son estáticos ni estándares.
"Hemos creado un modelo que combina lo mejor de lo analógico con lo mejor de lo digital"
En cada edición incorporamos avances acordes a la evolución empresarial y a nuestra propia innovación educativa. También se incluyen aspectos para disminuir la brecha tecnológica que creará la Cuarta Revolución Industrial. En Esade tenemos la convicción de que la universidad juega un papel fundamental en la creación de una sociedad más preparada, competitiva y más justa, y nuestra misión es facilitar un tejido profesional cualificado que dé respuesta a los grandes desafíos de la evolución de nuestros sistemas socioeconómicos.
¿Qué acciones se establecen en Esade para alinear la universidad con las necesidades del mercado laboral? ¿Y para mejorar la empleabilidad?
Las Escuelas preparamos a los universitarios y a los profesionales en las áreas más demandadas para que sepan dar respuesta a las necesidades laborales actuales, pero, al mismo tiempo, debemos ser capaces de anticipar qué especialidades y capacidades serán claves en los próximos años y diseñar programas ad hoc. En Esade somos muy conscientes de esta responsabilidad y del desafío que supone. Ahora mismo ofrecemos nuevas titulaciones en materias muy específicas, como Design Thinking for Business Innovation. Nuestra enseñanza se centra en el desarrollo de las competencias que demandará el mercado de trabajo. Fruto de este énfasis hemos diseñado programas como el de Liderazgo Influyente o Business Agility. Consideramos que en todas las carreras y programas se debe enseñar el idioma del siglo XXI, el digital, e incorporar, también en toda nuestra formación, materias que hagan referencia al entorno STEM (ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas). Por este motivo contamos en nuestro porfolio con programas como Fintech, Legaltech, Transformación Digital, Inteligencia Artificial o Digital Twins, entre otros. El reto que asumimos en Esade es el de formar a profesionales para el presente, pero también para el futuro, ya que estamos ante una nueva realidad incierta pero llena de oportunidades de empleo. En la actualidad, las compañías requieren perfiles con algo más que una carrera universitaria.
Como vicedecano de programas de Esade Executive Education, ¿qué medidas establece Esade para adecuar la educación a un mundo en constante cambio?
Nuestros programas In/On, en formato online y blended, combinan lo mejor del mundo analógico con lo mejor del digital y están diseñados para dar respuesta a un mundo en constante cambio, donde se precisa de una mayor flexibilidad y personalización. Además, la especialización de cada uno de ellos dota al profesional de las herramientas que necesita para enfrentarse a los desafíos que nos presenta la digitalización de la economía y la empresa. Insisto: la innovación es un aspecto clave de nuestra metodología, inherente a la institución, y gracias a la cual podemos ofrecer una propuesta educativa de calidad con la que adaptarnos a estos constantes cambios.
"Hemos incrementado el aprendizaje del alumnado con la formación online/blended"
¿Cuáles crees que son los retos a los que se enfrenta la educación superior en la era de la digitalización?
En primer lugar, creo que muchas universidades y escuelas de negocio tienen pendiente esa digitalización de su oferta académica que ya demanda el sector. No tiene sentido que se siga enseñando como hace 50 años, con métodos tradicionales y un modelo estandarizado anacrónico, para una sociedad que habla el idioma de esta nueva era de la digitalización. Comenzando por el enunciado, ya tenemos que ser conscientes de hacia dónde nos dirigimos y adecuar estructuras, procesos, metodologías y temarios a esa realidad.
Otro gran reto será la formación continua. En un mundo en el que los cambios se producen a un ritmo nunca antes experimentado, se hace prioritario un aprendizaje de por vida para seguir siendo competitivos y no quedarnos obsoletos para el mercado de trabajo.
La identificación de talento será otro de los grandes desafíos. Para mejorar la empleabilidad será imprescindible una mejor identificación y acompañamiento del talento desde edades muy tempranas.
Por último, otro importante reto será la barrera económica. Los costes académicos son, en muchos casos, el factor determinante por el que los estudiantes no pueden acceder a una educación superior de calidad. La tecnología se constituye como un poderoso aliado, al favorecer fórmulas más flexibles y asequibles de aprendizaje.
En este nuevo paradigma educativo, en el que las universidades ya no compiten con las de su mismo ámbito geográfico, sino que se extienden más allá de sus fronteras, ¿cómo afronta Esade esta nueva realidad?
Las cifras hablan por sí solas. Más de 60.000 antiguos alumnos, procedentes de 104 nacionalidades y casi 9.000 alumnos actuales. Nuestra filosofía "going global" nos lleva a estar presentes en muchos países y nuestro objetivo es incrementar estos datos.
En este nuevo contexto, Esade continúa desarrollando una formación multidisciplinar, que aborda las tecnologías emergentes mediante herramientas y métodos de vanguardia, y se abre al mundo con una oferta educativa virtual de calidad, en diferentes idiomas, para facilitar el acceso de estudiantes de todo el planeta.