
La propuesta que Pablo Casado efectuó este miércoles a Albert Rivera como su futuro ministro de Exteriores si gana las elecciones del 28A no ha sido bien recibida por Ciudadanos, que no tardó en reaccionar con mofas. José Manuel Villegas, secretario general de la formación naranja, espetó a Casado que "no era momento de ir de sobrados" y reprochó la poca idoneidad de hacer "bromitas" con el futuro de España y de "repartir cargos". A última hora de la noche, el mismo Rivera contestó a Casado devolviéndole el dardo envenenado.
"Yo le podría ofrecer el Ministerio de Universidades", ha asegurado durante su paso nocturno por 'El Hormiguero' de Antena 3. Rivera tendió este martes la mano al PP, al que ofreció un pacto de gobierno tras las elecciones generales del 28 de abril. Casado, recogiendo el guante, aseguró que la oferta del partido naranja le parecía "buena idea" aunque llegase tarde.
"Rivera sería un buen ministro de Exteriores", defendió Casado el miércoles. "Yo le podría ofrecer el Ministerio de Universidades", respondió Rivera, provocando las risas del público. "Ahora en serio, nos jugamos mucho. Yo no le tengo miedo al voto. Si quieren que sea yo presidente, votarán a Ciudadanos. Si no, votarán a Casado", ha añadido.
Mirando al modelo andaluz
Rivera se reafirmó en su intención de tratar de buscar un acuerdo con el PP tras los comicios para lograr "un gobierno de cambio" similar al andaluz. "Le propongo al PP que más allá de ideologías, de listas... si hay un solo escaño más, que formemos gobierno", insistió.
Eso sí, el presidente de Ciudadanos aseguró que para impulsar un nuevo Ejecutivo no haría falta contar con Vox. "No tienen por qué estar en el Gobierno", aseveró, para después apuntar: "Tendrán que decidir si apoyan a Sánchez o un gobierno de PP y Cs".
Así, Rivera quiso dejar claro que el partido liderado por Santiago Abascal "tiene ocurrencias" que no comparte. "No necesitamos locos con pistolas o tiroteos en los colegios. Además, yo creo que puede haber familias LGTBI y que no son enfermos", explicó.
Por último, el dirigente catalán recalcó que "nunca" llegará a un acuerdo con el secretario general del PSOE tras su respuesta ante el problema catalán. "Y la Ejecutiva del partido así lo decidió de forma unánime", ha zanjado.