El Consejo de Ministros reunido este viernes en Barcelona ha aprobado una declaración en la que rechaza y condena el consejo de guerra que en 1940 sentenció a muerte al presidente de la Generalitat Lluis Companys.
En dicha declaración, el Ejecutivo proclama además su reconocimiento y la restitución de la dignidad de Companys como presidente de la Generalitat.
La ministra portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, y la ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, han explicado que este acuerdo amplía el que ya tomó el Gobierno en 2010, cuando ya reconoció la figura del político. Batet ha subrayado que entonces la familia solicitó que una "reparación" más amplia y contundente, especialmente, el reconocimiento de que fue asesinado.
Lluís Companys fue presidente de la Generalitat de Cataluña de 1934 a 1940, líder de Esquerra Republicana de Cataluña y ministro de la Marina de España en 1933. Tuvo que exiliarse durante la Guerra Civil a Francia, pero fue capturado y sometido a un consejo de guerra. Tras el consejo, el dictador Francisco Franco dio el "enterado" a su sentencia de muerte y fue fusilado al alba el 15 de octubre de 1940 en el castillo de Montjuic (Barcelona), que hacía las veces de prisión.
La decisión, sin embargo, no ha impresionado demasiado al Govern. La consellera de Justicia de la Generalitat, Ester Capella, ha valorado como "un gesto que llega tarde" la condena del Gobierno al consejo de guerra que acordó la ejecución del expresidente de la Generalitat Lluís Companys. "Recibimos el anuncio del Consejo de Ministros 40 años tarde. Valoramos el gesto pero es únicamente un gesto", ha expresado en una atención a los medios para valorar la medida aprobada este viernes por el Consejo de Ministros en Barcelona.
Capella ha subrayado que el Gobierno de Pedro Sánchez debe "hacer justicia" con una ley que anule los procedimientos sumarísimos y la sentencia que condenó a muerte a Companys. Ha razonado que el Ejecutivo central debe presentar un proyecto de Ley que incluya anular estos procedimientos, y ha recordado que así lo hizo el extitular de Justicia del Govern Carles Mundó aprobando la correspondiente ley: "Cataluña ya hizo lo que se tenía que hacer".
También ha instado a que el Gobierno central pida perdón por la ejecución del expresidente, como ha resaltado que han hecho otros Estados, como el alemán y el francés.
Restauración del honor perdido en el franquismo
Además, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades devolverá las Medallas a siete académicos a los que se le retiraron por encontrarse en el exilio durante los años 40, cuando comenzó la dictadura franquista. Los siete investigadores científicos y académicos de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales tienen en común su pertenencia a la institución y la pérdida en vida de sus medallas académicas. En concreto, el Gobierno ha devuelto sus medallas a Enrique Moles Ormella (medalla 1); Ignacio Bolívar y Urrutia (medalla 2); Honorato de Castro y Bonel (medalla 5); Enrique Hauser y Neuburger (medalla 10); Emilio Herrera y Linares (medalla 15); Pedro Carrasco Garrorena (medalla 18); y Blas Cabrera y Felipe (medalla 22).
De este modo, el Ejecutivo ha reconocido el "carácter injusto" y declarado la "ilegitimidad" de las sanciones impuestas a los siete ilustres académicos de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, cesados durante el periodos de la dictadura. Asimismo, el Gobierno, según ha señalado Celaá, ha generado una comisión para investigar todas aquellas personas y entidades que "requiere rehabilitación y garantía del derecho al honor" de los miembros de las reales academias de ámbito nacional y que fueron sancionados durante la Guerra Civil y la dictadura.