El pleno del Parlament de Cataluña ha aprobado este martes que los seis diputados suspendidos por el Tribunal Supremo (TS) deleguen sus funciones indefinidamente en un sustituto -incluido el voto- tras votar el rechazo a la propia suspensión, lo que les hace mantener el acta. La Cámara ha abordado hoy la suspensión de los dirigentes independentistas Carles Puigdemont, Oriol Junqueras, Jordi Sànchez, Jordi Turull, Josep Rull y Raül Romeva que el juez Pablo Llarena decretó el 27 de julio y que ha condicionado la actividad parlamentaria catalana desde entonces.
Han sido 71 los diputados que han votado en un primer punto (A) en contra de la suspensión de los diputados y 66 los que han votado a favor del punto (B), en el que se contempla la delegación de funciones de estos dirigentes en un compañero de grupo. Los dos procesados de ERC, Junqueras y Romeva, han delegado sus funciones en el portavoz del grupo en el Parlament, Sergi Sabrià. Puigdemont y los otros diputados, de JxCat, sin embargo, han declinado elegir un sustituto.
Ninguno de los diputados procesados -que seguirán sin percibir el sueldo de diputado- ha votado por delegación hoy, apuntalando el independentismo su mayoría en el voto de CatECP después de que la CUP se haya negado a "obeceder" a Llarena.
La votación se ha producido con los diputados de Ciudadanos y el PP ausentes del hemiciclo y tras una bronca sesión específica celebrada al calor de la tensión vivida anoche en el propio edificio tras el intento de radicales independentistas de asaltarlo en enfrentamientos contra los Mossos.
La anécdota de la jornada se ha vivido en el momento de la votación. El Parlament estrenaba sistema de voto en los escaños y los diputados han tenido serios problemas para emitir el suyo. Han hecho falta varias intentonas para desesperación del presidente de la Cámara, Roger Torrent.
El desacuerdo inicial entre JxCat y ERC por este asunto ha mantenido bloqueado el Parlament desde julio
Como recuerda Europa Press, JxCat y ERC anunciaron la semana pasada un acuerdo que permitía 'desbloquear' el Parlament, paralizado desde julio, y resolver la situación: amparándose en el artículo del reglamento del Parlament que detalla los pasos a seguir en caso de suspensión, convocaron la Comisión del Estatuto del Diputado y aprobaron -con el apoyo de CatECP y la CUP- un dictamen que insta al hemiciclo a votar si acepta la suspensión y propone que los afectados puedan "designar" a un diputado que ejerza sus derechos.
Con el fin de resolver este escenario antes del Debate de Política General, que comienza este martes por la tarde y se alargará hasta el jueves, el presidente del Parlament, Roger Torrent, con el acuerdo de la Junta de Portavoces, convocó este pleno específico a las 12.00 horas con un único punto en el orden del día: el debate y votación del dictamen.
Sin embargo, había dudas sobre si la iniciativa prosperaría porque el artículo 25 del reglamento, que habla de las suspensiones, dictamina que la votación en el pleno debe lograr la mayoría absoluta y el letrado mayor del Parlament, Joan Ridao, consideró durante la comisión que esta prerrogativa afecta a los dos puntos que tiene el dictamen.
El texto tiene una parte dispositiva que habla explícitamente del artículo 25 antes de introducir los puntos del, por lo que "si se aprueba la letra B se tiene que poner en relación a esta primera parte que también se aprueba y, por tanto, los proponentes están situando lo que proponen en el marco del artículo 25", expuso Ridao.
No obstante, fuentes independentistas opinan que la vinculación es sólo explícita en el caso del primer punto, mientras que no está claro que el segundo tenga que aprobarse forzosamente por mayoría absoluta.
Además, el secretario general de la Cámara, Xavier Muro -máximo responsable de los juristas del Parlament-, trasladó este lunes a los coordinadores de los grupos que el segundo apartado no requería mayoría absoluta.
¿Mayoría absoluta o simple?
La discusión sobre la mayoría absoluta o simple venía condicionada por el hecho de que los diputados suspendidos no podían votar, lo que ha dejado a JxCat y ERC, con 59 votos, a merced de lo que decidiesen tanto los cuatro escaños de la CUP como los ocho de CatECP, puesto que precisan de al menos 68 para la mayoría absoluta.
El dictamen se aprobó en comisión con los votos de JxCat, ERC, CatECP y la CUP, aunque estas dos últimas formaciones puntualizaron que su 'sí' no era al contenido del texto, sino a elevarlo al pleno.
El resto de grupos no participaron en la votación al entender que el Parlament no puede decidir si acata una decisión judicial, pero mientras que PSC-Units y el PP sí participaron en el debate de la comisión, Cs se fue poco después de su comienzo tras expresar su rechazo al dictamen.
Asimismo, el grupo naranja anunció que está preparando una querella criminal contra los miembros de JxCat y ERC de la Mesa de la Cámara catalana por sus decisiones sobre los diputados suspendidos por el Supremo y que estudia incorporar al letrado Ridao porque consideran que debería haber advertido de que el dictamen es contrario a la ley.
La querella también incluirá a otras dos diputadas: la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas (JxCat), y Mónica Palacín (ERC) en tanto que miembros de la Mesa de la Comisión del Estatuto del Diputado, porque Cs cree que debería haber frenado el debate del informe.