Ciudadanos ha roto definitivamente este viernes el pacto de investidura que mantenía desde 2015 con el PSOE de Andalucía (PSOE-A) y que ha permitido a Susana Díaz mantenerse en el poder. La decisión, que ya se venía barruntando durante toda la semana, aboca a la región a un adelanto electoral.
Ha sido el Comité Ejecutivo nacional de Ciudadanos reunido este viernes en Málaga el órgano de la formación que ha tomado la decisión final después de que el líder del partido en Andalucía, Juan Marín, haya propuesto hoy al mismo la ruptura del acuerdo. Ha sido el propio Marín en rueda de prensa junto al secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, quien ha anunciado la decisión, subrayando que ha sido respalda "por unanimidad" por todos los miembros del órgano.
El dirigente 'naranja' ha glosado ante el Comité un informe en el que se recogían los incumplimientos del PSOE-A y su "falta de voluntad" para acometerlos, destacando sobre todo que no se ha reformado la ley electoral y no se han suprimido los aforamientos.
Marín: "Susana Díaz a lo único que le tiene miedo es al calendario judicial y a la sentencia de los ERE"
Marín avisado de que Díaz y el PSOE-A "han agotado la paciencia de los andaluces y de Ciudadanos", toda vez que ha criticado que "cuando se trata de hablar de regeneración democrática el PSOE-A da un portazo, huye del debate" y además, como ha rechazado, "intenta justificar lo injustificable: hacer responsable de la ruptura del pacto a los que cumplimos al cien por cien nuestros compromisos", recoge Europa Press.
En la misma línea, el líder andaluz de Ciudadanos ha señalado que la única explicación que encuentran a este comportamiento de los socialistas es que "Susana Díaz a lo único que le tiene miedo es al calendario judicial, a la sentencia de los ERE, la comisión de investigación de la Faffe y a las consecuencias que se dirimen de ese caso".
El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ya dio un ultimátum este miércoles a Díaz para que en 48 horas -antes de la ejecutiva de este viernes- el PSOE-A se aviniese a poner en práctica estas promesas de regeneración democrática. Pese a este aviso, Ciudadanos en Andalucía llevaba tiempo ya abogando por un adelanto electoral. Prueba de ello es que el partido ratificó antes de verano a Marín como candidato.
Desde la Junta se ha esgrimido que el tope de la legislatura (primavera de 2019) está demasiado cerca como para reformar el Estatuto de Autonomía de cara a modificar la ley electoral andaluza y que la supresión de los aforamientos es algo que debe partir del ámbito estatal y para el resto de comunidades.
Rivera busca adelantar al PP de Casado en Andalucía y el PSOE aprovechar los sondeos favorables y esquivar el caso ERE
La lectura política de esta ruptura cuando hasta hace no tanto PSOE y Ciudadanos defendían que su acuerdo se mantenía estable es que a los de Rivera les interesa cuanto antes la celebración de unos comicios en los que podrían quedar por encima del PP. Un 'sorpasso' que sería un duro golpe para el nuevo proyecto de Pablo Casado.
Por otro lado, el PSOE-A, aunque ha acusado a Ciudadanos de comprometer la legislatura y abocar a la región a elecciones, es consciente de que un adelanto puede ser positivo para Díaz ahora que los socialistas cogen aire en los sondeos y la derecha se presenta dividida. Además, de este modo alejarían la cita electoral todo lo posible de la sentencia del caso de los ERE. En todo caso, es la propia presidenta de la Junta la única que tiene en su mano la convocatoria de elecciones.
Tal y como ha informado elEconomista, parece probable que la fecha electoral sea el 25 de noviembre. Las expectativas del PSOE como Ciudadanos en Andalucía dejan poco margen para otra fecha que no sea ésta o el domingo anterior, el del 18. Cabe recordar que los comicios deben ser convocados con 54 días de antelación, de modo que el día debería quedar fijado antes de que finalice el mes de septiembre.