
Támara Carrasco, detenida ayer por la Guardia Civil por coordinar a los Comités de Defensa de la República (CDR) independentistas durante Semana Santa en acciones como sabotear los peajes catalanas, concurrió en las listas de Guanyem -el partido fundado por Ada Colau- en las elecciones municipales de 2015 en la localidad de Viladecans.
Según informan varios medios, Carrasco concurrió como número tres en la lista, aunque sólo resultó elegido un edil de la formación. A medida que avanzaba la presente legislatura en las corporaciones locales y el procés se recrudecía, la postura de la ahora detenida se radicalizó y se acercó a los postulados de JxSí y, en último término, de la CUP.
Al parecer, el momento definitivo fue el referéndum ilegal del 1 de octubre. Las imágenes que se vieron en Cataluña con enfrentamientos entre independentistas y la Policía llevaron a Carrasco a dejar los círculos de los 'comunes' e ingresar en la acción de los CDR.
Tal y como apuntan estas informaciones, Carrasco tuvo un proceso de radicalización casi exprés. De hecho, ha trascendido en las últimas horas en las redes sociales una fotografía suya con la portavoz de Ciudadanos en Viladecans, la localidad donde también fue arrestada ayer. Pese a las discrepancias políticas, ambas coincidieron en una fiesta y se hicieron varias fotografías, sin dar evidencias del duro enfrentamiento político que se viviría semanas después en Cataluña.
Investigada por terrorismo
La Fiscalía investiga ahora a Carrasco por los delitos de terrorismo y rebelión. La detenida difundió en las redes sociales un audio en el que explicaba acciones y estrategias que pensaban llevar a cabo distintos comités durante la pasada Semana Santa, como cortes de carreteras y sabotajes de vías ferroviarias, y en el que no descartaba extenderlas a Mercabarna y el puerto de Barcelona.
"Si podemos parar el puerto sería brutal, porque dejamos sin abastecimiento las islas baleares, los chinos se cabrearían, también hay muchas mercancías, por ejemplo la Seat que lleva los coches en barcos, y todo lo que es entrada de mercancías de la península y sur de Europa", señala la detenida en el mencionado audio que le atribuye la Fiscalía.
"Algunos hablan de meternos en el aeropuerto, pero es muy jodido porque en el aeropuerto te puede disparar la Guardia Civil", afirma en otro momento la coordinadora de los CDR.
Durante la Semana Santa los CDR levantaron barreras en varios peajes de la red viaria catalana, cortaron carreteras y llevaron a cabo sabotajes para reivindicar la "república catalana" y pedir la liberación de los presos soberanistas.
En un comunicado en su cuenta de Twitter, los CDR han advertido de que este tipo de detenciones les reafirman en su "firmeza de seguir luchando": "Nacimos de la represión al referéndum del 1 de octubre y ahora, resistiendo como resistiremos ante esta nueva embestida, saldremos reforzadas y con más apoyo que nunca".
Debate político sobre la figura penal
Desde el espectro político se han producido varias manifestaciones en contra de que las acciones de los CDR sean considerados como terrorismo.
La propia Colau, alcaldesa de Barcelona, ha considerado grave y preocupante que se acuse de terrorismo a los CDR y ha afirmado que supone una "banalización del terrorismo y ofensa a las víctimas", así como una utilización del Derecho Penal para criminalizar al adversario político, ha dicho. Por su parte, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, rechaza que se persiga por terrorismo y rebelión a los CDR y que se les compare con la kale borroka.
El PSC, a su vez, considera algunos actos de los CDR "más cerca de la violencia que de la libertad de expresión" y los ve "penalmente condenables". Sin embargo, no cree que deban ser investigados como terrorismo.
Desde el independentismo, el presidente del Parlament, Roger Torrent (ERC) defiende a los CDR y acusa al Estado de "autoritario". En esta misma línea, JxCat, ERC y la CUP han presentado una resolución de apoyo en la Cámara catalana.
En el lado contrario, el PP aplaude que se actúe "sin contemplaciones" contra los CDR y que se les aplique "las normas de la 'kale borroka'". También se ha criticado desde las filas 'populares' a los Mossos por no "frenarlos". Igualmente, Cs ha celebrado que Fiscalía investigue a los CDR porque sus acciones "no se pueden tolerar".