
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha pedido a las empresas que estaban instaladas en Cataluña y que trasladaron su sede social por el proceso independentista que vuelvan, y ha llamado a los españoles a comprar productos catalanes y que "no dejen de hacerlo nunca".
En el acto de presentación este domingo en Barcelona de la candidatura del PP para las elecciones del 21-D, ha asegurado que el independentismo "ha desatado la inseguridad y la incertidumbre" en Cataluña, lo que cree que ha provocado la marcha de más de 2.000 empresas y entidades financieras.
Ha lamentado que la economía catalana está notando las consecuencias de las decisiones de los dirigentes independentistas, por lo que ve "urgente abrir una nueva etapa para que los catalanes no tengan que abonar la factura después de haber padecido la fractura y para que todo vuelva a la normalidad".
En su primera visita a Cataluña tras ponerse en marcha el artículo 155 de la Constitución para responder al desafío secesionista, Rajoy ha advertido de que todos los sectores de la economía catalana "ya sufren" las "sectarias, divisorias y frívolas decisiones" de los independentistas y es "urgente" evitar mayores daños económicos.
Una etapa que permita que los catalanes no tengan que "abonar la factura tras padecer la fractura" y que haga posible "que todo vuelva pronto a la normalidad".
Tras recordar el "desplome de las ventas y la anulación de reservas turísticas", que han "frenado en seco" la "pujante" economía catalana, Rajoy ha prometido que su Gobierno trabajará "hasta el último día" para que proyectos tan importantes como la Agencia Europea del Medicamento vayan a Cataluña.
Ha recordado que desde el punto de vista técnico Barcelona tiene "la mejor calificación" de entre las ciudades candidatas para albergar esta sede europea, "pero los paladines de la ruptura han mostrado su ilimitada capacidad de destrucción" y eso puede afectar a la aspiración de la ciudad condal.
También ha prometido Rajoy que trabajará para que ferias y reuniones internacionales económicas que ahora hasta ahora han llenado recintos en Cataluña no dejen de venir a esta comunidad.
Para el jefe del Ejecutivo, una de las "peores mentiras" del independentismo ha sido la de asegurar que los bancos y las empresas estarían "encantados de invertir" en una Cataluña independiente y que la economía no se vería afectada.
Rajoy ha recordado que España ha sufrido una crisis durísima y Cataluña ha participado en la recuperación, pero la "inestabilidad" actual en la comunidad está "frenando" su capacidad de crear empleo.