
"El amor a tu país es algo que protagoniza inmensas gestas históricas. Es algo demasiado importante como para dejárselo a los que les va bien", dice Iñigo Errejón, líder madrileño de Podemos que perdió el pulso nacional con Pablo Iglesias.
Resultan llamativas estas palabras viniendo de un peso pesado del partido morado, cuando desde hace semanas el mensaje de la formación ha llegado a ser confundido con el de los independentistas de Cataluña. "Quien más necesita país, patria, son la gente humilde", continúa Errejón, en una entrevista que este sábado publica el diario El Mundo.
Una de las cosas que más le molestan es que una bandera sirva para fomentar una separación y no para estrechar lazos -"como la bandera de España en el Mundial", ejemplifica, en el sentido más positivo-. Sin embargo, no sucede así en España últimamente. "No me gusta cuando alguien te enseña la bandera como si tú no formaras parte", explica, y relata que algo así le sucedió en la calle esta misma semana. "Una fuerza progresista que no puede reivindicar la identidad nacional tiene pocas posibilidades de transformar el país y, por consiguiente, de ser útil", argumenta.
Practicando la autocrítica hacia su partido, Errejón admite que Podemos "ha pecado a veces de prepotencia", aunque lo justifica por el escenario político en el que surgieron. "Ahora el cl ima exige más soluciones y menos proclamas", reflexiona.