El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, lanzó un duro mensaje al Rey Felipe VI, asegurando que ha "hecho suyas las políticas catastróficas con Cataluña del Gobierno de Rajoy e ignora deliberadamente a los millones de catalanes que no pensamos como ellos". El Rey acusa a la Generalitat de deslealtad inadmisible al Estado.
En una declaración institucional que se retrasó finalmente hasta la noche de este miércoles, Puigdemont se ha centrado especialmente en el discurso del monarca del pasado martes. El 'president' le ha interpelado directamente, asegurando que "perdió una oportunidad de dirigirse a estos ciudadanos".
La batería de reproches de Puigdemont a Felipe VI ha tenido un núcleo sobre el que ha insistido, la negativa férrea de asumir un diálogo con Cataluña y el posicionamiento con el Ejecutivo: "El Rey tampoco ha tenido interés en conocer la opinión del Govern y ha aceptado un rol inadecuado".
En un tono palpablemente más conciliador, Puigdemont ha admitido que ha recibido diferentes propuestas y se ha mostrado "abierto al diálogo". Una disposición que, sin embargo, va acompañada de un mensaje a los ciudadanos catalanes: "Mi Gobierno no se desviará ni un milímetro del compromiso con el que querenos hacer las cosas". Puigdemont, en ese sentido, ha avisado de que "lo que vamos a hacer es lo que otros pueblos han hecho y otros pueblos harán: un camino marcado por la voluntad de los ciudadanos".
El 'president' ha tenido un mensaje para la población española, a la que ha agradecido una "solidaridad y amistad muy valiosa".
Puigdemont también ha lanzado un discurso para los suyos y ha defendido el talante de su pueblo en los últimos días: "Una vez más, el pueblo de Cataluña demostró que es un solo pueblo, que es una piña". Y ha avisado de las reverberaciones de los sucesos del 1-O, en la jornada del referéndum: "Hubo imágenes muy simbólicas que ayudan a entender el hermanamiento, el rechazo a la violencia y a las cargas policiales contra la gente pacíficamente concentrada".
Respuesta del Gobierno
El Gobierno de Rajoy ha comparecido instantes después de la intervención de Puigdemont. Ha sido la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, que ha pedido al 'president' que respete a España, que respete a Cataluña, que trate a sus instituciones con el respeto que merecen y que respete sobre todo a los catalanes"
Sáenz de Santamaría ha recordado que Puigdemont se mantiene fuera de la ley y que, con su línea secesionista, ha llevado a Cataluña a una situación única: Nunca han vivido Cataluña y España una fractura como la que vivimos ahora".
