
El presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, ha ofrecido una rueda de prensa, con dos horas de retraso debido a un ataque de lumbalgia, después del tradicional despacho veraniego que ha tenido con el Rey Felipe VI en el Palacio de Marivent, en Palma de Mallorca. Rajoy ha explicado que el tema catalán ha sido uno de los asuntos sobre los que ha hablado con Felipe VI, insistiendo una vez más en que "no va a haber referéndum".
El presidente del Gobierno ha advertido de que si la Mesa del Parlamento catalán califica favorablemente la proposición de ley de referéndum registrada por JxSí y la CUP el Ejecutivo lo recurrirá inmediatamente, porque es "una nueva patada al sistema democrático".
Y es que, según ha subrayado, Cataluña es el asunto que más le preocupa en estos momentos, porque cree en la unidad de España y porque es su obligación defender la ley y a los catalanes que no quieren la independencia.
"Creo que doy una batalla por una justa causa y porque creo que hay gente que se está equivocando, que se ha entregado en manos de la gente más extremista y radical que ha habido en España en decenas de años, que son los de la CUP (...) Esa es la gente a la que, por lo visto, algunos les dejan que marque el rumbo en Cataluña. Desde luego Mariano Rajoy no se lo va a dejar", ha incidido.
Por eso, se ha congratulado de que el Tribunal Constitucional haya admitido a trámite el recurso presentado por el Gobierno contra la reforma del reglamento del Parlamento catalán que permitiría la aprobación exprés de las llamadas "leyes de desconexión".
Una reforma "ilegal y profundamente antidemocrática", ha argumentado, que "cercena" derechos de los diputados que no son la mayoría, que ha sido suspendida por el TC en tanto decide sobre el recurso del Gobierno.
También sería ilegal -ha añadido- que la Mesa calificase favorablemente la proposición de ley del referéndum, por lo que el Gobierno presentaría un recurso al TC. "Es una nueva patada al sistema democrático, en una dinámica que algunos han establecido, que es perversa y que va contra el propio espíritu de la UE, uno de cuyos principios básicos es el Estado de derecho y el respeto a la ley", ha apostillado.
Bajo su punto de vista, "muy difícil va a ser exigirle a ningún ciudadano que cumpla cualquier ley cuando los gobernantes de una comunidad autónoma en España lo que están haciendo es exactamente lo contrario, que es incumplir la ley y además presumir de que se van a saltar la ley a la torera".
"No va a haber referéndum porque España es una democracia, es un Estado de derecho, es un país donde hay ley y la ley lo tenemos que cumplir todos. Y los primeros, los gobernantes", ha proclamado.
Preguntado por posibilidad de que el PSOE quiera iniciar en septiembre conversaciones para la modificación constitucional, el jefe del Ejecutivo ha dicho que él es partidario "de no hacer nada" antes del 1 de octubre, fecha anunciada del referéndum catalán, ni siquiera empezar a hablar de la reforma del modelo territorial o de la Carta Magna.
Eso sí, ha insistido en que ante el 1 de octubre hay que dar "un mensaje al mundo" de que España es "un país serio, donde se cumple la ley y los gobernantes están sometidos al cumplimiento de la ley", y ha indicado que después de esa fecha, con independencia de cuál sea el escenario, la "prioridad inexcusable" es que haya un acuerdo entre las principales fuerzas. De no ser así, ha advertido, estarían cometiendo "un gran error".
Su apuesta, ha recordado, es que el PP, el PSOE y Ciudadanos, e incluso otras fuerzas, vayan juntos, porque en "lo esencial" piensan lo mismo y creen en la unidad de España, en la soberanía nacional y en el principio de igualdad de los españoles.
"No vamos a discutir el 3% de los problemas cuando lo importante es el 97%", ha añadido y, tras recalcar que le parece "razonable" que en estos temas estén juntos, Rajoy ha recordado que no se puede modificar la Constitución sin los apoyos del PP, pero tampoco sin los del PSOE o Cs. Rajoy participará a mediados de septiembre en Cataluña en la escuela de verano del PP.
Pide no hacer política con el Prat
Rajoy ha informado al Rey Felipe VI de la situación de caos que sufre el aeropuerto de El Prat a consecuencia de la huelga de los empleados de los controles de seguridad y ha reclamado no usar "este asunto contra nadie por razones meramente políticas".
El presidente del Gobierno ha pedido "no ser mezquino" con este asunto y ha evitado entrar en polémica con la Generalitat catalana: "Yo no voy a exigir a la Generalitat que ejerza sus competencias, que las tiene. Hay un problema puntual en un aeropuerto y tenemos que intentar resolver los problemas de la gente y no hacer política con esto.
Defiende el turismo
Rajoy ha asegurado que le parece "un disparate tratar a patadas al turista que por fortuna viene aquí" y, además, se ha posicionado "radicalmente en frente y en contra" de "algunas de las actuaciones de los grupos de extrema izquierda".
Rajoy se ha referido de esta manera a los distintos hechos que se han producido en los últimos días, tanto en Cataluña y como en Baleares, en contra del turismo por parte de la agrupación independentista Arran.
"No sé si hay que recibir al turismo con un cartel de bienvenido señor turista pero lo que no se puede hacer es, al señor turista que por fortuna viene aquí, tratarlo a patadas; me parece un disparate", ha dicho.
Exige elecciones en Venezuela
El presidente ha reiterado que España no reconocerá la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela, al considerar que es "ilegal, antidemocrática y contraria a la voluntad de sus ciudadanos", y ha exigido a Nicolás Maduro que convoque elecciones y que libere a los presos políticos.
Rajoy ha expresado la condena del Gobierno a la violencia registrada en Venezuela y ha exigido la convocatoria de elecciones "libres y democráticas", así como la liberación de 620 presos políticos, ha señalado citando datos de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Ataque de lumbalgia
Fuentes de Moncloa han confirmado que el aplazamiento se ha debido a un ataque de lumbalgia sufrido por Rajoy tras su habitual paseo matutino y por el que ha tenido que recibir medicación.
A su llegada al Palacio, Rajoy ha contestado a los medios de comunicación presentes -cerca de medio centenar de personas, entre redactores y cámaras- que se encontraba bien. "Muy bien, muchas gracias", ha dicho al ser preguntado por su estado de salud.
Tras la reunión, lo primero que ha hecho Rajoy ha sido disculparse por el retraso ocasionado.