El presidente de la Comunitat Valenciana, Ximo Puig, pronunció en Madrid un marcado discurso federalista con críticas directas a la centralización del Estado, entre las que incidió especialmente en la concentración de estructuras en Madrid y el "dumping fiscal". "Madrid absorbe el 29% de los funcionarios de la Administración General del Estado. Es el cuádruple de lo que le corresponde por población", denunció en cuanto a la primera cuestión, y en materia de tributos espetó un mensaje contundente al denunciar "un dumping fiscal antipatriótico y perjudicial para el resto de comunidades".
"Hay que descentralizar el poder concentrado aquí en Madrid", planteó Ximo Puig en su discurso en el Nueva Economía Fórum celebrado en el hotel Westin. Al respecto, criticó "un poder institucional que alberga todos los ministerios, todos los órganos representativos y todos los tribunales estatales", así como "un poder financiero y económico beneficiado por el 'efecto capitalidad', que se traduce en un dumping fiscal generador de asimetrías. Un dumping fiscal antipatriótico y perjudicial para el resto de comunidades". "La macrocefalia política, económica y financiera que aglutina la capital de España es ineficiente, injusta e insostenible", defendió.
Para justificar su postura, desglosó "dos datos". "Madrid absorbe el 29% de los funcionarios de la Administración General del Estado". "Es el cuádruple de lo que le corresponde por población. Son casi 150.000 empleados públicos estatales: una cifra mayor que el número de trabajadores autónomos en 46 provincias españolas. O mayor que el número de afiliados al Régimen General de la Seguridad Social en 21 provincias. No parece sensato", criticó.
"Y les doy el segundo dato. Somos un país descentralizado. También lo es Alemania, ¿no? Pues miren sus sedes judiciales dónde se ubican: La Corte Constitucional y la Corte Suprema Federal están en Karlsruhe; la Corte de Finanzas, en Múnich; la Corte de lo Laboral está en Erfurt; la Corte de lo Social, en Kassel; y la Corte Administrativa, en Leipzig. Todos los tribunales quedan lejos de Berlín, capital política, y de Frankfurt, capital económica que a su vez alberga la sede del Banco de Alemania, la sede de la principal bolsa del país, y la del Banco Central Europeo. ¿No les parece que esa es una buena orientación para nuestra cohesión?", planteó.
En el turno de preguntas Puig fue preguntado sobre qué instancias judiciales se trasladaría a Barcelona, ante lo que rehusó a responder: "No me voy a meter en ese jardín", dijo. "Pero que nadie se confunda: nuestra postura no va contra Madrid, sino a favor de la racionalidad, la cohesión y la armonía del conjunto de España", agregó en su intervención para rebajar los ánimos.
Infrafinanciación "inaceptable"
Como cabía esperar, Puig aprovechó su presencia en Madrid para poner sobre la mesa la principal reivindicación de la Comunitat Valenciana, sobre la que se pronunció con contundencia. "Todos ustedes saben que la piedra angular de la Agenda Valenciana es la necesidad de un nuevo sistema de financiación autonómica. La Comunitat Valenciana es la peor financiada de España, como han dictaminado, con rigor, todos los expertos. Nuestra situación es crítica, no porque gastemos mucho, sino porque percibimos muy poco. 2.000 millones menos al año que Galicia y 4.000 menos que Cantabria, que tienen una renta per cápita similar a la nuestra. O 6.000 millones menos que las comunidades forales, con una renta per cápita más de un 40% superior a la valenciana. Es totalmente inaceptable", aseveró.
"Los valencianos y las valencianas no queremos privilegios, pero tampoco discriminaciones. Nuestra reivindicación no es identitarista. Solo es una cuestión de justicia, de igualdad, de respeto. La financiación de las Comunidades Autónomas ha de garantizar un Estado del Bienestar potente y hacer viable este proyecto compartido llamado España. Porque ahora es más urgente que nunca y no puede retrasarse más. Ya no caben excusas para establecer un nuevo sistema de financiación que ponga en el centro la igualdad entre personas", agregó en la misma línea.