
El precio de la vivienda se ha incrementado notablemente en los últimos años. Una tendencia que se mantendrá hasta 2028 o 2029. Así lo dejaron claro los directivos de las grandes promotoras presentes en la La Gran Jornada Inmobiliaria, organizada por elEconomista.es. Todos situaron la elevada demanda, la falta de oferta, el incremento de los costes y la escasez de mano de obra como los motivos que provocarán que la escalada de los precios no se detenga. Con todo, el sector anticipa que las subidas serán más comedidas que hasta ahora, limitándose a alzas similares a las propias de la inflación. La unanimidad de las promotoras respecto a los precios sorprende en un escenario en el que el acceso a la vivienda ya toca niveles de burbuja en algunas zonas. Pero debe tenerse en cuenta que alcanzar dichas cotas no frenará la demanda, ya que los sueldos se han elevado notoriamente desde entonces. Por si fuera poco, el hecho de que España haya sumado 2 millones de habitantes más en los últimos 5 años añade aún más presión a los precios.
Ante esta situación, la única solución pasa por un notable incremento de la oferta. En este contexto, el secretario de Estado de Vivienda, David Lucas, señaló en la jornada que "hemos iniciado la construcción de 127.000 viviendas en 2024, un 16,5% más que en 2023". Un incremento que va en la buena dirección para paliar la escasez de oferta, cifrada en más de 500.000 viviendas. Aunque para corregir ese déficit habría que edificar unas 160.000 viviendas anuales, que sólo se alcanzará acelerando la liberación de suelo finalista, el que está listo para iniciar una promoción, tal y como reclamaron de forma unánime las promotoras en la jornada y para lo que sería necesario un pacto entre administraciones, que implique a los dos grandes partidos políticos.