Madrid
El contexto de incertidumbre generado por la guerra comercial y el debilitamiento del dólar han vuelto a catapultar al oro como valor refugio, disparando la demanda de este metal en 2025. Una tendencia que se ha visto reforzada por las compras de los bancos centrales. Un cóctel que ha llevado al metal a revalorizarse más de un 30%, lo que, evidentemente, ha beneficiado a las firmas de extracción de esta materia prima. Estas firmas se colocan entre las más alcistas del mercado, con un repunte del 45% en lo que va de año. Un rally que, según los expertos, aún no se ha detenido, ya que otorgan al sector un recorrido alcista superior al 15% de cara a los siguientes doce meses. Las mineras de oro se convierten así en una opción a tener en cuenta por los inversores.