
Repsol busca dar entrada a un socio financiero para una cartera de plantas solares y parques eólicos ubicados en España, con una capacidad conjunta de 706 MW. La petrolera busca así replicar las alianzas que ya tiene con Pontegadea, InfraRed y Schroeders Greencoat en otros proyectos al desprenderse de una participación del 49% en este lote de instalaciones renovables. En caso de concretarse, esta operación tiene un beneficio doble para Repsol. Por un lado, mantiene la gestión y la mayoría del capital de los desarrollos verdes, lo que le permite seguir obteniendo importantes beneficios por ellos. Por otro, la firma obtendrá recursos con los que financiar nuevos proyectos energéticos. Se trata, por ello, de una acertada estrategia para reducir las inversiones.