Madrid
Adif ha reactivado su ofensiva judicial contra las empresas que la CNMC sancionó en 2019 por formar el llamado cártel del AVE. Las compañías implicadas se organizaron durante 14 años para adjudicarse contratos de electrificación del AVE y las líneas convencionales. Su modus operandi consistía en simular que competían en las licitaciones cuando la realidad era que se repartían incluso con sorteos las adjudicaciones. Según la CNMC, estas prácticas delictivas generaron un sobrecoste en los contratos que podría superar los 1.000 millones. Resulta por ello comprensible que el gestor de la red ferroviaria reactive su macrocausa para reclamar daños y perjuicios una vez que ya hay sentencia judicial firme contra los integrantes del cártel.
