
Las bolsas a ambos lados del Atlántico han arrancado el año tal y como finalizaron 2024, al alza. El mercado europeo escala un 6,3% desde el 1 de enero, mientras que Wall Street sube más del 3%. Un impulso que en el caso del Viejo Continente lleva a su indicador de referencia, el EuroStoxx 50, a estar a solo un 6% de su máximo histórico.
Asimismo, su homólogo en EEUU, el S&P 500, cotiza ya en niveles propios de burbuja según sus multiplicadores de beneficio. Estas elevadas cotizaciones reducen el recorrido que los analistas otorgan a la renta variable occidental. Así, Wall Street solo ofrece un 3,5% mientras que Europa ya se ha comido el 70% del impulso esperado para todo 2025. En este contexto, lo más aconsejable es esperar a una corrección para volver a atacar la bolsa.