El selectivo que aglutina a las empresas de las 23 economías más desarrolladas del mundo, el MSCI World, marca la diferencia anual más grande con su homólogo para los países en vías de desarrollo, el MSCI Emerging Markets.
En concreto, 12 puntos tras la subida de algo más del 18% que muestra el índice de bolsa global que se está viendo beneficiado por la tendencia alcista que los índices americanos muestran en el año y que se ha visto reforzada tras la victoria de Donald Trump. La vuelta del magnate a la Casa Blanca tiene justo el efecto contrario en las plazas emergentes. Ello debido a la desestabilización de las relaciones comerciales que pueden suponer las políticas de Trump. Todo un reto que resta atractivo a las cotizadas de países como China o India.