El Gobierno renunció a última hora a tratar de sacar adelante la Ley de Suelo en el Congreso. Con ello evitó que dos medidas fueran tumbadas en una misma semana, tras decaer el lunes la proposición de ley contra el proxenetismo.
Sin duda, el momento elegido no fue el más adecuado para recabar apoyos, ya que coincide con la campaña de las elecciones europeas. Esto ha impedido que una normativa que incluía medidas adecuadas para agilizar la concesión de licencias y, con ello, la construcción de vivienda saliera adelante. La falta de oferta ante la elevada demanda es la razón que explica que los precios de los inmuebles sigan disparados pese al encarecimiento de las hipotecas. Sería por ello deseable que tras los comicios europeos del 9 de junio, el PSOEimpulsará el diálogo con otras formaciones políticas, incluyendo al PP, con el fin de aprobar la Ley del Suelo.
